Vamos a dibujar un "Concept-Art". Tomo 2

Vamos a dibujar un "Concept-Art". Tomo 2
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Veo ampollas, dedos agrietados, ojos que ya no saben discernir lo que es real de lo que no lo es y ganas de seguir dibujando. Veo a la segunda parte del acercamiento personal que estamos realizando sobre el mundo del concept-art y que, mediante la realización de un ejemplo sencillo, intentará animar a los más miedosos a lanzarse a romper el síndrome del papel en blanco.

En el último tomo nos acercamos al concepto de “Marco Visual”, definimos una época, una estética e incluso acotamos las características físicas de nuestro aguerrido personaje.

Recordad al tipo duro, John McClane, y a esa mezcla entre Bruce Willis y Clint Eastwood que nos acabó saliendo. Aquella vez llegamos a bocetar la silueta, a colocarla en una posición correcta y, finalmente, realizar el dibujo de línea. Hoy vamos a ser más valientes, vamos a enfrentarnos contra uno de los peores enemigos que existen y que dejan más bonus al vencerlo. Hoy toca darle caña a la iluminación.

Iluminación dramática y efectista.

Una vez que nuestro McClane está dibujado necesitamos eliminar cualquier atisbo del boceto original que hicimos en azul. De hecho, cuando acabemos el concept ni tan siquiera necesitaremos el dibujo de línea ya que la aplicación de la luz en los volúmenes del dibujo conformará la ilusión de que tiene relieve y textura.

Nuestro siguiente paso será el de pintar a McClain de un color gris plano. Ya sabemos que nuestro dibujo va a ser en blanco y negro (aunque le metamos algún punto de color) así que debemos tender a buscar un tono medio desde el cual evolucionar. En esta ocasión el elegido ha sido un gris oscuro que nos permitirá ir hacia el blanco en las zonas muy iluminadas o hacia el negro en las zonas más oscuras.

3_iluminacion.jpg

Llega el momento de preparar una iluminación efectista. Recordad que nuestro título va a necesitar mucho contraste y que el concept art debe dar una idea general de cómo va a verse luego el título.

En esta ocasión vamos a colocar un foco que apunte hacia abajo en la parte superior de McClane y una especie de luz difusa que le venga desde la derecha (siempre de cara al que ve la imagen). Esa luz podríamos trabajarla en otro color (naranja en este caso) para que resalte todavía más las formas.

Una vez que está preparado el “setup” de luces vamos a empezar a imaginar cómo pueden afectar a la ropa y al propio personaje. Como siempre, buscad referencias de imágenes que tengan una iluminación parecida o, mejor aún, si tenéis algún programa 3D preparaos una escena semejante y utilizad el render como ejemplo de base. Copiar, si es para mejorar, está permitido y es hasta obligado.

En el otro tutorial decidimos que el fondo sería eliminado y apostaríamos por una composición más minimalista. Así que vamos a tirar de recurso fácil y aplicaremos un gradiente en el fondo. También vamos a trabajar el suelo y a colocar la silueta del foco que apunta desde el techo. Observad que el protagonista no está completamente metido en el foco, simplemente tiene la mitad del cuerpo y se consigue acentuar la idea de que ha salido de la nada y, de repente, está apuntándote con una pistola. Efecto dramático barato pero resultón.

4_iluminacion_fondo.jpg

Estas breves referencias visuales nos ayudarán mucho cuando entremos en materia.

La luz naranja.

El siguiente paso ya lo habéis adivinado. Vamos a empezar a dibujar el cómo afecta la luz a nuestra “geometría”. En otras palabras, vamos a dibujar el reflejo naranja sobre el cuerpo del personaje.

En las siguientes imágenes podéis ver cómo el color naranja se va colando entre las comisuras de los labios, cómo ayuda a definir la forma de la cara, de las cejas, de la ropa y de las principales arrugas del pantalón. El truco consiste en difuminar sólo las partes necesarias (utilizaremos la herramienta dedo aunque hay otros sistemas) y dejar como sólidas las zonas en las que la luz afecta de un modo más directo.

Después de colorear la primera capa de naranja vamos a intentar potenciarlo. En Photoshop usaremos un duplicado de esa capa con un tono naranja más luminoso, le aplicaremos un filtro de desenfoque y la aplicaremos con el modo “Luz Vívida”. Esto conseguirá que nuestro naranja apagado gane tonos de exposición y se acerque a un color más vivo.

5-iluminacion_vivida.jpg

Fijaos que si eliminamos las líneas ya empezamos a intuir que hay relieve. Si conseguís un efecto parecido es que vamos bien. Dadle con paciencia y al final, si aplicáis la luz de un modo coherente acaba saliendo, la cuestión es insistir.

La luz Blanca.

La luz naranja ya nos permite intuir las formas pero todavía queda trabajo. Es el turno de la luz que le viene de arriba y que, por lo tanto le ilumina parcialmente. El foco del suelo nos ayudará a entender cómo incide la luz en el modelo y cómo va a afectar a sus formas (definidas en el dibujo a línea).

Iluminaremos esos mechones de pelo, la nariz y las líneas de expresión a lo Bruce Willis que le confieren esa personalidad dura y chulesca. Las arrugas de la camisa que porta la pistola, algunos pequeños reflejos para definir a los dedos, una gran franja de luz sobre el chaleco para remarcar que permanece hierático y, sobretodo, la pierna que tiene introducida en medio del foco.

Importa la suavidad y la elección de las partes que deben permanecer duras y las que se van a difuminar. La herramienta dedo de Photoshop nos va a ser de gran utilidad y si jugáis eliminando la capa con el dibujo a línea y volviendo a colocarla iréis viendo cómo se va marcando el volumen.

6-iluminacion_blanca.jpg

6-iluminacion_blanca2.jpg

En el siguiente tomo acabaremos el concept art y visitaremos el truco final que le conferirá ese aspecto amenazador y más acabado, el sombreado. En este estilo de dibujo que simula la incidencia de la luz sobre las formas, lo más importante es saber y entender cómo las sombras definen el volumen.

De hecho, una vez que entendáis cómo funciona y lo hayáis practicado puede que prefiráis empezar siempre por las sombras y, cuando estas marquen los volúmenes empezar a iluminar. No importa, cada maestrillo tiene su librillo y el resultado final será muy parecido. El caso es entenderlo.

Venga, que esos Photoshops no se rindan.

Más en VidaExtra | Vamos a dibujar “Concept-Art”. Tomo 1

Comentarios cerrados
Inicio