En VidaExtra estamos encantados con 'Overwatch', para qué nos vamos a engañar. Aunque tenemos algún disidente dentro del equipo que no ha terminado de congeniar con la nueva licencia de Blizzard, en general hemos quedado muy satisfechos con lo que hemos podido probar hasta ahora.
Nos habéis visto jugarlo, habéis leído nuestras impresiones tanto en consola, como en PC, y en general os hemos dado bastante la brasa, porque hemos visto en él potencial para un nuevo gran universo que nos podría dar años de diversión. El día 24 de este mismo mes sale por fin a la venta, aunque a grandes rasgos ya nos podemos hacer una muy buena idea de lo que traerá.
Como os comentaba este pasado lunes, es una razón para volver a apostar fuerte por un shooter en primera persona, lo cual se antojan palabras mayores. Eso sí, palabras que estoy dispuesto a justificar desgranando los aspectos principales que más me han gustado del cuidado diseño de 'Overwatch' y que tan buenos ratos me han ofrecido durante la fase de pruebas ya concluida.
Ni un héroe malo
El elenco inicial del juego es de veintiún héroes, divididos a su vez en cuatro estilos: ataque, defensa, tanque y apoyo. Obviamente, aquí cada uno defenderá sus favoritos en función de su estilo de juego, pero he tenido la sensación de que ninguno de ellos resulta inútil o secundario. Es más, pillarle el truco a cualquier héroe es relativamente fácil, lo que nos ofrecerá versatilidad para poder jugar 'Overwatch' como queramos. ¡Ah! Y por supuesto, vendrán más.
Equilibrio y juego en equipo
Al hecho de que todos los héroes tengan su punto útil se suma el factor fundamental de que cualquier equipo en busca del éxito tendrá que recurrir al sano equilibrio entre ellos. Si tenemos demasiados héroes de un tipo, por ejemplo, o nos falta de otro, el menú de selección avisará al equipo para que se lo piense dos veces. Y por lo que hemos podido probar, es muy cierto: aquí los lobos solitarios no van a ningún lado, hace falta esfuerzo en equipo, visión estratégica, comunicación y solidaridad.
Siempre en pos del espectáculo
En la era de los eSports como aspirantes a nuevo ocio de masas, Blizzard ha puesto todo su conocimiento de la materia en juego con 'Overwatch', que está repleto de detalles que demuestran sus pretensiones como espectáculo: repeticiones de la mejor jugada, votaciones al logro más destacado al final de la partida, modo espectador y una marea de detalles en diseño que hacen de este shooter atractivo para quienes simplemente estén observando.
Agilidad, alegría
La crítica más común al título desde que se anunció ha sido su carencia de modo campaña, lo cual ha llevado a muchos a verlo como un free-to-play cobrado como producto tradicional (lo cual ya os digo yo que no es para nada cierto). En su lugar, 'Overwatch' apuesta fuertemente por ser un chorreo constante de partidas PVP, las cuales se perciben siempre ágiles y entretenidas. Solo juega en contra de este aspecto el "paseíllo" que nos toca dar en los mapas más alargados tras morir.
Cada detalle cuenta
Que en Blizzard han sido siempre maestros en el apartado artístico no lo duda nadie, pero en este título se percibe un mimo excepcional incluso para ellos. Los mismos héroes son ya una muestra evidente de ello, pues desprenden una fortísima personalidad desde el primer momento que posamos los ojos sobre ellos. Por si eso fuera poco, las divertidas vías de personalización que tienen, con algunas skins verdaderamente locas, demuestran especialmente ese mimo por el detalle visual que han aplicado.
Escenarios para lo que te plantees
Los escenarios del juego ya se intuían bonitos desde el primer momento, pero experimentarlos desde dentro demuestra que son mucho más que paisajes llamativos. Su diseño, perfectamente adaptado en cada caso al modo de juego que corresponda, nos permiten desarrollar la estrategia que queramos con cualquier héroe: rincones por los que adentrarnos sin que nadie nos descubra, zonas abiertas para el combate frontal, espacios pensados para fortificar nuestras defensas y un sinfín de posibilidades más.
Todo bien engrasado
La experiencia de juego durante esta última fase de beta ha sido totalmente satisfactoria, y al menos en mi caso no he experimentado problemas de lag, ni errores especialmente evidentes durante el juego. El tiempo de matchmaking tampoco era excesivo en ningún caso, algo a lo que ayuda el hecho de poder hacer otras cosas por el menú de juego mientras se cierran los emparejamientos. Con tantas pruebas realizadas ya durante los últimos meses, parece que Blizzard tiene la maquinaria de 'Overwatch' bien engrasada de cara a su lanzamiento.
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