Las Navidades han resultado un negocio redondo para los fabricantes de consolas, pero también para los vendedores, y, por encima de todo han sido el bálsamo de ocio SANO que merecen los jugones. En esto de las cifras de ventas hay que andarse con mucho ojo, porque los datos son oficiosos: es decir, no hay una manera cien por cien fiable de contrastar las cifras. Los estudios y encuestas mandan. Ni siquiera las compañías se aventuran a hacer públicos sus números.
Ante la falta de canales más fiables para contrastar los datos tenemos que echar mano de los discutidos y discutibles informes del portal Vgchartz. Según ellos, la Nintendo DS lleva 64,6 millones de aparatos vendidos en todo el mundo. Le sigue la PSP, con 29,6 millones y, muy por detrás, están las consolas no portátiles. La Wii gana al trío “next-gen” con 19,2 millones. La Xbox 360 casi le alcanza con 16,2 millones de unidades vendidas y, bastante por detrás, se sitúa la PlayStation 3 con casi 9 millones de aparatos repartidos por todo el mundo y la clara desventaja de haber salido más tarde.
En España sabemos que el asunto pinta algo distinto. De nuevo según Vgchartz, la última semana de diciembre la reina del Carnaval fue la DS (43.134 unidades vendidas), seguida muy de cerca por la PS3 (39.000) y la PS2 (31.000). La últina de la fila en el terceto de Sony es la PSP (23.000). La Wii se coloca en el quinto lugar de la lista (20.000) y cierra la lista la Xbox 360 (poco más de 4.000 consolas vendidas).
Llama la atención el número de las ventas de la Wii. Al parecer, pudieron ser muchas más. La propia Nintendo reconoce que, pese a haber superado sus problemas de distribución y haber doblado su producción, se queda corta ante la exigencia de los usuarios que quieren más y más Wii. MDB Capital Group, una consultura independiente, pone el dedo en la llaga: Si Nintendo tuviese consolas para todos, duplicaría sus ventas.
Eso en mi pueblo se llama incompetencia. Es una opinión personal: si yo tengo una empresa y dejo de obtener el doble de ganancias por no darle al cliente lo que quiere, ruedan cabezas. Seguro.
En cualquier caso, y volviendo a los datos en España, si todo este aluvión de cifras se acercase a la verdad podríamos deducir lo siguiente:
Realmente el problema de la escasez de Wii se debe más a la falta de previsión (y provisión) de Nintendo que a un incremento exagerado de ventas. Desde luego, la maniobra de Sony de rebajar el precio de la PlayStation 3 ha dado sus frutos. Además, por si a alguien le quedaban dudas, las consolas portátiles siguen en muy buena forma. Por último, lamentablemente, la Xbox 360 lo tiene crudo en España (creo que injustamente).
Y como si esto fuese el final de un programa de Iker Jiménez quedan preguntas sin respuesta. Por ejemplo, ¿qué pasa con la PlayStation 2? ¿Todavía queda alguien en este país que no tenga una? Algunos tenemos la sospecha de que hay quien las colecciona… ¡Y por decenas!
Vía | Diario Expansión
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