Que vueltas da la vida señores. Quién nos iba a decir hace cuatro años que la próxima consola de Nintendo cosecharía el éxito que consiguió en su día PS2.
Por aquél entonces la segunda consola de Sony reinaba en el mercado con cientos de exclusividades frente a Xbox y GameCube y copando prácticamente las listas de ventas de títulos.
Parece ser que la tortilla se ha girado y ahora, no sólo Wii va camino de conseguir el éxito que logró PS2, es que además PS3 también se acerca sospechosamente al nivel de ventas obtenido por GameCube.
La locomotora de Wii va dispuesta a arrebatar el título de consola más vendida de la historia a PS2, y es que, si tenemos en cuenta las ventas cosechadas por ambas durante los primeros 26 meses, Nintendo vendió 17,5 millones de Wiis en Estados Unidos mientras que Sony colocó 15,9 millones de PS2.
En base a esos datos, las expectativas de ventas para la blanquita de Nintendo cosecharían para dentro de cinco años unos 55 millones de consolas en Estados unidos y un total de 154 millones a nivel global.
Al hablar de PS3, en cambio, vemos reflejada la misma historia que en su día llevó a Nintendo a replantearse sus estrategias. Durante los primeros 26 meses de vida de GameCube, se consiguieron colocar un total de 6,75 millones de consolas, un porcentaje cercano al cosechado a día de hoy por la bestia negra de Sony que ha vendido 6,79 millones de unidades.
Todos sabemos que las ventas de Sony no van bien, seamos más o menos partidarios de las estrategias de la marca. Pero debo reconocer que la comparación con GameCube me ha hecho replantearme lo sucedido desde otro punto de vista.
Lo digo porque, tras tener una Dreamcast y una PS2, no adquirí una GameCube hasta que no estaba prácticamente muerta y enterrada. Fue por una oferta que encontré en una conocida tienda de videojuegos en la que por 99 euros se vendía un pack de consola, ‘Super Mario Kart: Double Dash’ y dos juegos a elegir.
Sigo sin tener PS3 y cuento con una Xbox 360 y una Wii sobre mi escritorio. Si no la he comprado aún es porque el precio y su catálogo me tira para atrás, así que, parece ser, que la historia se repetirá también con la consola de Sony.
De aquí a dos o tres años, cuando el precio haya bajado considerablemente, saldrá alguna oferta, me la compraré y además podré obtener sus mejores juegos tirados de precio. Lo realmente preocupante para Sony es que estoy convencido de que el mío no será un caso aislado.
Vía | Kotaku
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