La última película de Tomb Raider me ha parecido tan mala que he tenido que volver al juego de 2013 para recomponerme

La última película de Tomb Raider me ha parecido tan mala que he tenido que volver al juego de 2013 para recomponerme

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La última película de Tomb Raider me ha parecido tan mala que he tenido que volver al juego de 2013 para recomponerme

Cuando se estrenó el regreso de 'Tomb Raider' a las salas de cines, me moría de ganas por verla, porque la elección de la oscarizada Alicia Vikander como protagonista y basarse en la nueva trilogía me daba buenas vibraciones, pero por diversos motivos la fui aplazando hasta que la quitaron de la cartelera.

Por suerte ya está disponible en DVD, Blu-ray y VOD, por lo que ahora no tenía excusa. Pero desde luego que no ha sido el regreso de Lara Croft que estaba esperando y no comparto el entusiasmo de algunos compañeros de Espinof.

Ojo, soltaremos algunos SPOILERS de la película y el videojuego.

Todo lo que hace mal la película...

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La propia Alicia fue desvelando en diversas entrevistas, aparte de dejar claro que conocía 'Tomb Raider' desde sus inicios, que ésta iba a ser una película bastante fiel al videojuego. Pero en realidad es más bien una reinterpretación del propio reboot homónimo de 2013, del que toma elementos prestados que se cuentan con los dedos de una mano, como el buque Endurance o la reina yamatai Himiko.

La película sí que nos presenta, en cualquier caso, a una Lara Croft por desarrollar y que tendrá que madurar a marchas forzadas dentro de un entorno de lo más hostil, aunque se centra demasiado en temas banales que no aportan nada al argumento, como una carrera con bicis donde intentará conseguir dinero fácil para embarcarse hacia el Triángulo del Dragón siguiendo una pista.

'Tomb Raider', la película, peca de un ritmo demasiado lento y no consigue remontar donde se supone que debería estar el cénit de todo largometraje de aventuras: la resolución de la isla Yamatai es lamentable en comparación con el videojuego. Si en el original de 2013 experimentábamos pinceladas de fantasía a cargo del séquito de la propia Himiko, Reina del Sol, y con diversas referencias a la Segunda Guerra Mundial dentro de esa isla japonesa, aquí todo se reduce a un cadáver que propaga una enfermedad sumamente letal y dentro de una tumba secreta con tan solo un par de trampas mortales. El bagaje es pésimo.

Tan solo la escena previa del avión colgando del precipio, otra referencia al videojuego, logró que no me durmiese durante las casi dos horas que dura la película, preguntándome constantemente por el cambio tan drástico del personal del Endurance (reducido a uno solo, el capitán Lu Ren), el nuevo destino de Richard Croft o ese uso casi testimonial del piolet al final de la aventura.

Por increíble que parezca, no me ha parecido mejor que las de Angelina Jolie.

Ha logrado que vuelva al Tomb Raider de 2013

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Lo que consiguió la película nada más terminarla, aparte de darle la peor nota posible en IMDB, fue volver a jugar al 'Tomb Raider' de 2013, ése que exprimí en dos días al 100% y que posteriormente volví a comprar para Xbox One.

Fue de mis favoritos absolutos de 2013, pero a su Definitive Edition apenas le di caña tras haber exprimido a tope la versión previa de Xbox 360. Sin embargo ayer tuve ese deseo irrefrenable de quitarme ese mal sabor de boca recordando por qué me gusta tanto esta nueva trilogía de Lara Croft de corte más maduro.

Me ha sorprendido comprobar lo bien que se sigue conservando a pesar de contar con cinco años a sus espaldas (su remasterización salió en enero de 2014, pero no deja de ser un pequeño lavado de cara), especialmente sabiendo lo que mejoró su fórmula por medio de 'Rise of the Tomb Raider' a finales de 2015.

El videojuego, al contrario que la película, sí que supo aprovechar el encanto de la isla gracias a un mundo abierto que se iba desvelando a nuestro paso, y con una Lara que iba creciendo a pasos agigantados dentro de ese paraje tan misterioso y peligroso. El largometraje es bastante monotemático, en ese sentido.

No sabemos qué destino correrá su secuela en cines, si es que llega a producirse (aunque sea sin Alicia Vikander, como se dejó caer hace tiempo), pero al menos me ha servido para regresar al 'Tomb Raider' de 2013 y querer hacerle otro 100%, ahora desde su Definitive Edition (que tenía casi de adorno en la estantería), y quitarme el mono hasta el estreno de 'Shadow of the Tomb Raider' en PC, PS4 y Xbox One en septiembre. Porque la maldición de las pelis sigue su curso...

En Espinof | 'Tomb Raider', las seis mayores diferencias entre la película y el videojuego

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