Enciclopedia es uno de los juegos más bonitos que han pasado por mis manos, pero no es su única gran baza

Enciclopedia es uno de los juegos más bonitos que han pasado por mis manos, pero no es su única gran baza

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Enciclopedia

Hay juegos que brillan más en lo visual y otros que lo hacen en lo jugable. Enciclopedia tiene ambas caras. Pese al miedo a encontrarme con un juego demasiado farragoso y lento, una primera explicación es más que suficiente para que le acabes cogiendo el truco rápido y entiendas hasta qué punto es mucho más ágil de lo que podría parecer.

Tras la idea de crear tu propia enciclopedia colocarás dados para ponerlos a trabajar, coleccionarás unas preciosas cartas de animales, e invertirás tus ahorros y premios en poder viajar por el mundo para estudiarlos. Con el pique con amigos por bandera, Enciclopedia demuestra ser mucho más que unos dibujos bonitos.

Enciclopedia: cómo se juega

Con seis rondas como límite cuyos inicios aportan un premio a todos los jugadores, lo primero que haremos al iniciar cada ronda es que todos los jugadores cojan cuatro dados de la bolsa y los lancen para ver sus puntuaciones. Cada uno de esos cuatro dados serán nuestros trabajadores, y a partir de ahí toca ir colocando uno por uno saltando de jugador en jugador para realizar acciones y obtener beneficios.

La gran baza de Enciclopedia y el pique que comentábamos antes es que en vez de utilizar nuestros dados podremos robar a nuestros rivales uno de los suyos. Sin embargo, de seguir esa estrategia, es muy posible que le estemos regalando una bonificación al contrario. Todo depende de los puntos y colores de dados que necesites para realizar las siguientes acciones en cada ubicación:
Embajada: colocaremos nuestro dado aquí para conseguir un token de expedición que luego nos servirá para sumar 2 puntos a otro dado o cambiarlo de color. Dependiendo de la puntuación del dado colocado recibiremos más o menos tokens.

  • Banco: sin importar el valor del dado, cada vez que coloquemos uno aquí recibiremos cinco monedas que también servirán para subir la puntuación de otro dado. Si llegamos aquí los primeros nos convertiremos en el jugador inicial.
  • Universidad: aquí contrataremos expertos que servirán como premios inmediatos, habilidades pasivas o premios al final de la partida. Sólo podremos tener cuatro expertos activos, pero podremos renovar los que ya tenemos o acumular más expertos bajo los cuatro activos de cara a puntuar más al final del juego.
  • Academia: valiéndonos del color del dado podremos recoger animales para poderlos estudiar y publicar nuestra experiencia con ellos.
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  • Expedición: el color del dado marcará qué continentes podemos visitar para estudiar animales y el valor nos dirá qué tipo de estudios podemos realizar sobre los mismos. Dependiendo de nuestra elección, y la posibilidad de aumentar nuestros puntos de estudio con monedas o tokens, colocaremos cubos de nuestro color sobre los animales para definir si lo que hemos estudiado es su familia, dieta, hábitat y/o clima.
  • Publicación: cuando ya tengamos varios estudios realizados, publicaremos la información común entre los animales de un mismo continente y obtendremos puntos por cada cubo colocado.

Pese a dar la impresión de tener mucho por hacer, lo cierto es que el tablero es lo suficientemente intuitivo para saber qué puedes hacer o no en cada una de las zonas, indicándose allí también las condiciones para sacarle partido a cada dado y las restricciones que debes tener en cuenta.

Antes de que seas plenamente consciente ya estarás acumulando cubos y puntos hasta conseguir dar varias vueltas al tablero. Para entonces, la montaña que parecía inabarcable mientras te estaban explicando el juego o leyendo las instrucciones será una mera colina completamente asumible.

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Mucho más que un juego con cartas bonitas

Si hay una palabra que define a la perfección a Enciclopedia, esa es monumental. Con un tablero enorme esperando a ser explorado, es uno de esos juegos en los que a menudo los jugadores se quedarán embobados estudiando alguna carta o dibujo a la espera de que alguien les avise de que ha llegado su turno.

Las ilustraciones de las cartas son una preciosidad y, si te gustan juegos como Wingspan precisamente por eso, vas a gozar paseando entre las 75 cartas magistralmente ilustradas que incluye Enciclopedia. Es un juego que indudablemente entra por los ojos.

Sin embargo, de nada serviría eso si todo se quedase en lo visual y el juego resultase excesivamente complejo, lento o individualista. Por suerte, la jugada de trastear con la estrategia de los dados y el pique de ir robando las mejores bazas al resto de rivales consigue que las partidas sean muy interactivas, reclamando no sólo que estés atento a tu progreso, sino también a las necesidades que tienen el resto para intentar adelantarte a sus movimientos.

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Pese a ser uno de esos juegos que asusta al empezar a colocarlo sobre la mesa, conforme vayan avanzando los turnos la gente empezará a entender qué es lo que tiene delante y a entrar rápido en sus dinámicas de colocación de dados y robo. Por la enorme variedad de cartas y estrategias que se van abriendo, no es uno de esos juegos que vayas a quemar en dos tardes.

Con opción de 1 a 4 jugadores, la opción de jugar contra un rival imaginario que va realizando acciones en base a las condiciones aleatorias que marca la partida al inicio me parece, además, una idea fantástica para que también puedas disfrutar de Enciclopedia en solitario si te apetece echar una partida o practicar antes de barrer a tus amigos.

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