Análisis de Rock Band 4: la saga llega en plena forma a la actual generación de consolas

Análisis de Rock Band 4: la saga llega en plena forma a la actual generación de consolas

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Análisis de Rock Band 4: la saga llega en plena forma a la actual generación de consolas
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Alex CD

Director

Coordinador editorial de VidaExtra. Llevo 20 años escribiendo sobre videojuegos en VidaExtra, desde análisis a noticias y artículos de opinión, además de desempeñar las labores de coordinación editorial del medio. LinkedIN

‘Rock Band 4’ ha sido el encargado de dar el pistoletazo de salida a los juegos musicales con instrumentos de plástico en las nuevas consolas. De hecho ese parece haber sido su principal objetivo, ya que en conjunto tiene menos opciones que su predecesor y muy pocas ganas de innovar en este terreno. Lo cual no es algo negativo en absoluto.

Estamos, en definitiva, ante un retorno a las raíces de la saga, algo que queda patente nada más empezar a jugar: el grupo que puedes montar responde a una formación clásica. Es decir: batería, guitarra, bajo y voces (hasta tres como máximo). Adiós a los teclados que tenía la anterior entrega o a cualquier otro experimento. Sencillo y directo. Y no necesitas más.

Vuelta a las raíces

Es de agradecer que Harmonix se haya centrado en ofrecer la mejor experiencia ‘Rock Band’ tal y como la conocimos en sus inicios. No es que vaya en contra de la innovación o los intentos por llevar la saga hacia nuevos niveles (es lo que ha hecho Activision con su nuevo ‘Guitar Hero Live’ y le ha salido bastante bien la jugada, pero eso ya os lo contaré en su análisis), sino que agradezco poder contar con un juego con el que me siento cómodo desde el minuto uno y que ofrece justo lo que busco en un ‘Rock Band’: pasarlo en grande tocando temazos, a poder ser en compañía.

No hay nada como introducir el disco del juego y estar rockeando delante de un público enloquecido en unos pocos minutos. Si has jugado a los anteriores ‘Rock Band’, lo que vas a encontrar aquí es exactamente lo mismo pero corriendo en las máquinas actuales. Se podría decir que se trata de una entrega de migración o de paso, como si fuera el primer título de todos pero con la lección aprendida.

Rock Band 4

La potencia de las nuevas consolas (la copia que me prestó Mad Catz para este análisis era de PS4) le ha permitido a Harmonix crear un juego fluido, con tiempos de carga muy reducidos y, a pesar de contar con menos opciones que la entrega anterior, con nuevas funcionalidades que le hacen a uno la vida mucho más placentera. Cambiar la dificultad en medio de un tema o improvisar solos de guitarra es más sencillo e indoloro que nunca. Lo de los solos mola: en pantalla se van mostrando unas sugerencias para que toques notas largas, seguidas y más, pero serás tú quien decida qué botones pulsar. El resultado es bastante curioso.

La calibración de los instrumentos es pan comido y puedes pasar de ahí a elegir alguno de los 65 temas que vienen incluidos en el disco para darle a una partida rápida en un par de minutos. También puedes practicar solos o crear tu propio grupo e irte de gira. Y ojo porque la vida en la carretera no es moco de pavo.

Al que le toque llevar el micrófono se va a cagar en todo lo cagable como no paren de salir esos temas que no todo el mundo ha escuchado trescientas veces

Rock Band 4 y su ligeramente escaso catálogo de temas

Y hablando de temas: sí, esos 65 que vienen de serie son muy pocos. A primera vista, sobre todo para el que no haya jugado nunca a un ‘Rock Band’, puede parecer un número muy elevado como para estar entretenido durante mucho tiempo. Sin embargo, todo aquel que haya pasado horas y horas con el resto de entregas sabrá lo mucho que engancha eso de tocar un tema tras otro, sobre todo en compañía, y sabrá ver que esos 65 temas se quedan cortos.

Es más, dada la calidad de los que venían incluidos en anteriores ‘Rock Band’ (tanto en disco como a través de la tienda digital), resulta que aquí no sólo se nos antoja un número un tanto escaso, sino que muchos no son precisamente los mejores temas de las bandas seleccionadas.

Si optas por la guitarra o la batería no hay demasiado problema a la hora de tocar temas menos conocidos de principio a fin (y si te ves apurado activas el modo sin fallos para que no te tiren fuera de una actuación si lo estás haciendo rematadamente mal y listos), pero al que le toque llevar el micrófono se va a cagar en todo lo cagable como no paren de salir esos temas que no todo el mundo ha escuchado trescientas veces.

Rock Band 4

En todo caso, si tenías una versión anterior de ‘Rock Band’ y habías comprado canciones en formato digital, puedes pasarlas a la nueva para no perderlas. Eso sí, solamente entre consolas de la misma familia: de PS3 a PS4 y de Xbox 360 a Xbox One. La mala noticia es que no existe ninguna opción que te permita importarlas todas de golpe. Tendrás que bucear en la tienda e ir añadiendo una a una aquellas que ya hubieras adquirido con anterioridad. Quizás algún que otro tema no esté disponible por el momento, pero se da en casos aislados y lo más probable es que acaben llegando.

Lo interesante sería saber cuándo vamos a poder importar también los temas incluidos en los discos de anteriores entregas. Al fin y al cabo pagamos por ellos y, al igual que con las canciones digitales, sería un detalle poder tocarlos en ‘Rock Band 4’.

Suerte que guardaste los instrumentos antiguos

Mad Catz no sólo se ocupa de la distribución del juego, sino de la fabricación de los instrumentos de ‘Rock Band 4’. Unos instrumentos que son prácticamente calcados a los de anteriores entregas. La guitarra es de plástico, muy ligera, y todo funciona a la perfección, tanto los botones repartidos por el mástil (5 en la parte superior y otros tantos más pequeños en la inferior, ideales para los solos) como el que se usa para rasgar o la palanca para hacer tremolos. Más allá de la inclusión del botón Share no hay más cambios a destacar. Se agradece que sea inalámbrica, eso sí.

Con la batería, que también va sin cables, sucede lo mismo. El pedal es algo más robusto e incorpora una plancha metálica donde se apoya el pie, lo cual se agradece, pero también resulta un poco más incómodo a la hora de atacar varios golpes de bombo seguidos. Los pads son correctos y parecen algo más silenciosos que en anteriores versiones. Y sí, si quieres le puedes añadir hasta tres accesorios que harán las veces de platos.

Rock Band 4

La buena noticia es que si conservas instrumentos de algún otro ‘Rock Band’ o ‘Guitar Hero’ por casa no será necesario que compres los nuevos, ya que son compatibles. Lo único a tener en cuenta es que para usar los inalámbricos viejos tendrás que conectar un dongle al puerto USB de la consola y que para los de Xbox 360 con cable necesitarás un adaptador si quieres usarlos en Xbox One, el cual se vende junto al juego o por separado. Para solventar cualquier duda aquí tienes una lista de instrumentos compatibles con ‘Rock Band 4’.

La dura vida del grupo de rock en carretera

En ‘Rock Band 4’ puedes entrar y ponerte a tocar temas sin más en partida rápida, lo cual ya es divertido, pero la cosa se pone mucho mejor cuando decides montar un grupo y salir de gira. Elige el nombre que quieras ponerle, crea a tu personaje y venga, a tocar de ciudad en ciudad.

Más allá de saltar de un concierto al siguiente, lo que te propone ‘Rock Band 4’ es: ¿quieres hacer dinero o prefieres aumentar tu base de fans? En función de lo que elijas, cada gira tendrá sus propias reglas. Por ejemplo, si decides ir de un lado a otro en furgoneta y sin depender de nadie podrás elegir el repertorio y ganarte la confianza de los fans. En cambio, si prefieres firmar con un manager, ganarás más dinero en cada bolo, pero perderás independencia y el tipo será quien tome ciertas decisiones. Tú verás lo que haces, pero en mi carrera particular de ‘Rock Band 4’ he optado siempre por ir en furgo y dormir en el sofá de los colegas.

Los conciertos tienen su chicha también: la selección de temas se lleva a cabo por votación entre todos los que estéis jugando, lo cual puede dar lugar a pequeñas desavenencias (¡¡mira, como en los grupos de verdad!!), y al final de las actuaciones tendrás la opción de tocar el tema que el público te está pidiendo o ir a tu bola. Yo me debo a mis fans, así que toco todo lo que me pidan. Al fin y al cabo la pasta sólo sirve para gastarla en la tienda de instrumentos o ropa y sí, claro que mola personalizar tu personaje con una nueva guitarra o unos pantalones locos, pero lo cierto es que tampoco tiene demasiada importancia.

La opinión de VidaExtra

‘Rock Band 4’ es un juego divertidísimo porque ya lo eran los anteriores y este no ha venido para reinventar nada, sino a estrenarse en la actual generación de consolas, ver qué tal responde la comunidad y asentar las bases para el futuro de la saga.

Tanto si decides jugar en solitario como si cuentas con alguien a tu lado apoyándote con otro instrumento, lo que vas a encontrar en este juego es mucho rock, entretenimiento y piques por ver quién lo hace mejor en los niveles más altos de dificultad. Buen retorno para la saga.

A favor

  • Es un Rock Band con todas las de la ley
  • Jugar acompañado
  • Tocar temazos en giras por todo el mundo

En contra

  • Catálogo algo escaso
  • No hay multijugador online para piques a distancia
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