Ancestors: The Humankind Odyssey no es un juego fácil de digerir durante las primeras horas. Es fácil creer que ya lo has visto todo y no tienes nada más por hacer, pero poco a poco vas aprendiendo a cogerle el truco a su bucle y te das cuenta de que hay más progreso del que aparentemente ofrece el juego.
Para echaros un cable con ese complejo inicio hemos preparado una guía con 13 cosas que nos habría gustado saber antes de empezar a jugar. Acciones básicas que el juego omite para hacer más realista la experiencia de descubrir a tu ritmo pero que, sin embargo, ayudan a hacer más llevaderas esas primeras horas y que te acabes enganchando.
Aprende a saltar cinemáticas
Aunque al ofrecer tutoriales el juego te muestra la opción de descartarlos, no hace lo mismo con las cinemáticas. Las secuencias de nacimiento, descubrimiento de zonas y paso del tiempo pueden llegar a ser soporíferas, así que aprovecha ese mismo botón (vista en pads compatibles con Xbox One y Share en el caso de PS4) para omitirlas. Lo único que deberás hacer es mantenerlo pulsado unos segundos.
Baja al suelo
Para ser un juego sobre menos, lo cierto es que los árboles están bastante desaprovechados. Las únicas opciones que encontrarás ahí serán frutas o hierbas, así que por muy divertido que resulte ir saltando de árbol en árbol gracias a las lianas, asegúrate de bajar al suelo para continuar con tu evolución.
No huyas de los enemigos
Muy relacionada con la anterior. Probablemente los peligros de tierra firme son los que te han impulsado a ascender, pero luchar contra los enemigos es una de las formas más fáciles de ganar logros evolutivos. Atacarlos con distintas herramientas u objetos supone conseguir logros distintos para cada elemento usado, así que siempre que veas algún enemigo, lánzate a por él para intentar asustarlo o matarlo.
Ejecuta acciones hasta que no escuches nada
A veces el juego no ofrece pistas visuales de que algo está funcionando, como al chocar algunas rocas. Otras, como a la hora de afilar el palo, hacen cambiar tanto los objetos que parece que ya has terminado de construirlos. Si la acción de levantar el brazo para golpear algo no tiene sonido, puedes dejar de manipularlo, pero si escuchas el aviso de que ya puedes bajar el brazo, continúa.
Aparearte debe ser tu principal objetivo
A más crías, más opciones de saltar a otra generación sin dejar habilidades atrás, así que tu principal objetivo en cada nuevo inicio debe ser conseguir el mayor número de crías posibles. Para ello intenta explorar lo máximo que puedas en busca de otros simios, especialmente si son hembras fértiles que te permitan ampliar tu familia.
Carga con crías para subir de nivel más rápido
Nunca abandones el nido sin un par de crías pegadas a ti. Son la clave para conseguir puntos de evolución en el árbol de habilidades, así que si quieres subir rápido tus mejoras es la mejor opción que tienes. De hecho, lleva contigo a todo el grupo, así podrás establecerte en otra zona sin preocuparte de tener que volver a buscarlos.
Protege al grupo
Tus simios van a tardar mucho tiempo en empezar a defenderse, así que manténte atento a todo lo que les pueda pasar y asegúrate de que te están siguiendo siempre que hagas algún desplazamiento complejo como, por ejemplo, atravesar un río con mucha corriente. Eso es aún más importante en el caso de las crías, así que si tu manada no lo hace por iniciativa propia, cambia de simio y carga todas las que puedas antes de volver a tu avatar principal.
¿Seguro que quieres salir a explorar?
Tu condición para salir a explorar debe ser siempre la de buscar nuevos miembros para la manada. Si crees que ya no hay nada más que puedas aprender en la zona en la que estás, busca una nueva en la que asentarte, pero el riesgo que conlleva es alto y, hasta llegar a la sabana, los beneficios suelen ser mínimos. Piensa bien si quieres dejar la comodidad y seguridad de tu cascada inicial.
Aprovecha los ríos para caminar erguido
Aprender a caminar erguido es otra de esas bazas que el juego nunca se encarga de explicarte y que es más fácil de dominar de lo que parece. Lo único que debes hacer es entrenar tu tren inferior levantándote siempre que puedas y, aunque a la hora de investigar es algo que puedes hacer de forma sistemática, la mejor opción de cara a potenciar esa habilidad es caminar por el agua.
Viaja siempre con una piedra y un palo afilados
Si te animas a explorar, hazlo cargado con una piedra y una rama, ambas afiladas. El palo te servirá para atacar a los enemigos que puedas cruzarte y agradecerás tenerlo a mano cuando debas socorrer a un miembro del grupo. La piedra también puede servirte como arma y, tras un ataque, para afilar una nueva rama más rápido.
Utiliza ambas manos
No sólo es básico a la hora de experimentar con los objetos que vas encontrando, también te facilitará tareas tan simples como la de crear un nido. No es lo mismo ir en busca de hojas de una en una que aprovechar ambas manos para cargar con un par. Luego podrás llevar grupos de objetos de aquí para allá, pero hasta entonces recuerda que tienes dos manos por algo.
Céntrate en mejoras sociales y de manipulación
Puede que el envenenamiento con ciertos alimentos te invite a gastar puntos de evolución neuronal en la capacidad de los simios para aguantar carne cruda o setas, pero son estados alterados que puedes curar con paciencia o relativa facilidad y que, a la larga, las propias crías acabarán sumando a tu colección de neuronas gracias a las mutaciones. Céntrate en todo lo demás para evolucionar más rápido.
Aprovecha los simios con mutación
Las crías son importantes para todo, incluido para ganar ciertas mejoras sin tener que preocuparnos por gastar puntos en el árbol de habilidades. Cruza los miembros que gozan de mutaciones para perpetuar esos cambios en el linaje y, aún más importante, protege a esas crías con tu propia vida.
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