Aprovechando que se ha puesto hace unos días a la venta en la eShop de Nintendo 3DS hoy voy a quitarme una espinita pendiente. Analizar el ‘VVVVVV’ de PC, otro de mis indiespensables junto con el ‘Super Meat Boy’. Ambos plataformas salieron, de hecho, el mismo año (2010), pero el trabajo de Terry Cavanagh lo hizo antes, el 11 de enero, y pudiendo encontrarlo actualmente, aparte de para esas dos plataformas, para Linux y Mac también. ¿Queréis saber por qué me parece tan bueno?
Pues porque lo es, ¡qué demonios! Deja en un irrisorio, pero no por ello feo, segundo plano el tema de los gráficos, hasta el minimalismo más absoluto, para centrarse simple y llanamente en el control. Un control, dicho sea de paso, atípico para ser un juego de plataformas. Porque, ¿a quién se le ocurre quitar el salto? A Terry y pocos más, desde luego. Porque efectivamente, aquí no habrá botón de salto al uso, sino botón para invertir la gravedad, y esto inevitablemente se traduce en un cambio de chip a la hora de avanzar por cada pantalla. Aunque ‘VVVVVV’ nos tiene reservadas más sorpresas.
VVVVVV: Vueno, Vonito, Varato, Vrillante, Vello y Bistoso
El punto de partida de este trabajo de Terry Cavanagh es simple. La nave de la tripulación del capitán Viridian (el protagonista que manejaremos) ha sufrido un problema muy serio con una interferencia desconocida, y a la hora de evacuar cinco de los seis miembros (nosotros somos el sexto; de ahí también las seis ‘V’ del título) han desaparecido, siendo nuestro objetivo reunirlos de nuevo en la nave.
La tarea, que en un principio, si tenemos en cuenta que estamos perdidos por el espacio, debería ser difícil, se torna más complicada, no solamente al tener que localizarlos (se nos darán pinceladas muy ligeras de dónde pueden estar) a todos, sino porque para cada uno el planteamiento de cada fase será distinto. Y muy original. Sobretodo esto último. Porque aunque la gravedad siempre estará presente, no todo serán, por ejemplo, fases estáticas. Cada una pondrá a prueba tanto nuestro ingenio como habilidad y paciencia. Y de esto vamos a necesitar mucho, porque moriremos en numerosas ocasiones. Posiblemente no tantas veces como otros indies del mismo palo, pero en nuestro primer recorrido será algo inevitable. Por momentos llegará a ser frustrante, pero no en demasía, teniendo ante sí un diseño de niveles bastante acertado. Cada vez que morimos volvemos al punto de control, y estos podemos encontrarlos a patadas. Aunque claro, hay que activarlos, y tan pronto activamos uno, ése permanece como el único punto de control activo.
‘VVVVVV’ es un juego que hay que experimentar, sin duda alguna, porque por muchas líneas que le dedique uno, su grandeza tiene que ser descubierta por uno mismo. Queda claro que no es un plataformas al uso, queda claro que su espíritu añejo no se oculta por ningún momento, y debería quedar claro que no es un reto asequible para todo el mundo. No es fácil, aunque tampoco exageradamente difícil si queremos completar su historia. Otra historia, valga la redundancia, es que seamos completistas, porque aparte del resto de la tripulación, tendremos que recoger 20 esferas que nos desbloquearán, poco a poco, canciones del propio juego, y al tenerlas todas, la habitación de los trofeos y el súper gravitrón. Como es lógico, la localización de estas esferas, en su mayor parte, es muy puñetera, requiriendo de nuestra parte más ingenio y habilidad de lo normal. También de esta forma se solventa un pequeño fallo en comparación con otros juegos del estilo, y es su corta duración para el modo principal. Si somos mañosos, en menos de una tarde nos lo podremos ventilar. Pero claro, después tenemos la selección de fases gratuitas desde un menú aparte del juego (con aportaciones de personajes ilustres de la talla de Magnus Palsson o Notch), y cómo no, el propio editor de niveles. Aquí no habrá fin. Su vida útil se dispara hasta el espacio y más allá.
Jugabilidad y música excelente: el combo perfecto
A pesar de su simpleza estética, ‘VVVVVV’ es un producto muy cuidado (aquí tendría que volver a recordar que es producto de una persona, sin contar a Magnus “Souleye” Palsson para la sobresaliente banda sonora), hasta tal punto que en cada cuadrícula (cada pantalla, que no fase, se corresponderá, salvo excepciones, a una cuadrícula) tendrá una frase a lo que podríamos llamar pie de página de la propia pantalla. En algunos casos nos dará pistas sobre lo que deberíamos hacer, en otras será simplemente descriptiva de un modo resumido… Habrá un montón, como podéis imaginaros.
No faltarán tampoco los guiños, siendo el más claro el de Meat Boy casi al principio del juego, ni tampoco el socorrido modo de juego Time Trials, ideal para repetir cada fase, puliendo nuestros tiempos y reduciendo el número de muertes con tal de obtener no ya la calificación de S, sino la V, la de mayor rango. Incluso si cumplimos determinados objetivos podremos desbloquear el modo Flip, que vendría a ser una especie de modo espejo, y el No Death mode, que como su nombre indica, hará que no podamos fallecer. El “god mode” de toda la vida, en definitiva, por si queremos recorrer el universo de ‘VVVVVV’ sin preocuparnos por nada, sabiendo que lo difícil ya se ha hecho.
A lo largo del análisis lo he mencionado un poco de pasadas, pero no sería justo terminarlo sin dedicarle las líneas que se merece, y es que si todo el desarrollo de ‘VVVVVV’ corrió a cargo de una persona (Terry Cavanagh), de un modo excelente, su parte sonora no pudo haber escogido a mejor maestro, ya que Magnus Palsson, conocido como Souleye, firmó posiblemente su mejor trabajo con una banda sonora sobresaliente. Con un toque chiptune que nos retrotaerá a otra época (también es su intención), y con unas melodías que se quedarán grabadas a fuego en nuestra cabeza, sonando sin descanso una y otra vez sin que se resienta nuestro interés por ellas. La pasión por explorar, como reza uno de sus cortes, también debería traducirse por la pasión por escuchar, porque tanto juego como música son un todo que no podría existir el uno sin el otro. Es un combo perfecto.
En resumen, a pesar del tiempo transcurrido, ‘VVVVVV’ se sigue erigiendo como un título indie que no debería pasar desapercibido para los seguidores de los plataformas, porque aúna calidad por todos sus poros. Además en Linux, Mac y PC, lo tenemos por 4,99 euros. ¿Qué más se puede pedir?
VVVVVV | PC
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Plataformas: 3DS, Linux, Mac y PC (plataforma analizada)
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Desarrollador: Terry Cavanagh
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Distribuidor: Terry Cavanagh
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Lanzamiento: 11 de enero de 2010
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Precio: 4,99 euros (8 euros en 3DS)
<p>‘<span class="caps"><span class="caps">VVVVVV</span></span>’ es un juego de plataformas <i>indie</i> que nos planteará jugar de un modo atípico con la gravedad. Totalmente indispensable.</p>
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