La década del 2020 estará marcada, entre otras muchas cosas, por la internacionalización del anime. Muchas de las series producidas por esta industria japonesa se ha situado en lo más alto de las listas de reproducción y parece que esta tendencia seguirá subiendo a límites insospechados. Sin embargo, no todos están del todo contentos con el resultado.
En una entrevista con el medio japonés Natalie, Michiyuki Honma, actual presidente de Studio Pierrot, habló largo y tendido sobre el estado de la industria actual. Y si bien está feliz por el buen camino que está teniendo, sí que ha discrepado sobre algo que se ha visto en numerosas ocasiones a lo largo de los últimos años: la censura en Occidente.
"Es difícil planear un trabajo que sea popular internacionalmente, o que se convierta en una serie a largo plazo. Por supuesto, estás apuntando a lo grande pero si haces un anime solo con eso en mente se va a volver aburrido. No se puede fumar, porque entonces no se puede enseñar fuera. La violencia está rebajada. Tienes que evitar pasarte de sexy".
Si bien tiene razón en gran parte de la conversación, está claro que mucha de la cultura vista en Japón no está del todo bien vista en Occidente (Y con razón). La sexualización de muchas figuras femeninas de diferentes edades (en muchas ocasiones de menores), ha provocado que muchos estudios se "enfaden" con Occidente.
Es cierto que hemos visto censura absurda por ver a alguien fumar, como es el caso de Sanji, o el uso de la violencia, como en Dragon Ball Z durante los 90. Pero estas censuras son cada vez menos frecuentes por suerte, y gran parte de la crítica de muchos usuarios se basan más en la sexualización desmedida que en otros aspectos.
En VidaExtra | 23 juegos de Naruto que, probablemente, no conocías: de su debut en WonderSwan a sus MMORPGs, pasando por las recreativas
Ver 11 comentarios