Dice la ciencia que las personas hipertimésicas son capaces de recordar qué llevaban puesto en una fecha concreta, qué tiempo hacía o incluso en qué día de la semana cayó esa fecha con una memoria muy por encima de lo normal.
Si la ciencia dijese algo sobre mi memoria respecto a fechas concretas, en cambio, lo más probable es que simplemente se limitase a decir que soy un maldito desastre que no tiene remedio. Jugar a Timeline Twist ha sido la última prueba que necesitaba para confirmarlo.
Una vuelta de tuerca al clásico Timeline
Heredado del ya mítico Timeline pero con arte renovado, dos modos de juego y la posibilidad de apuntar a la versión basada en acontecimientos históricos o la relativa a eventos clave de la historia del entretenimiento reciente, este Timeline Twist será la delicia de todos aquellos que tienen más memoria que yo.
La idea detrás del modo clásico de Timeline, también incluído en esta versión, está en intentar crear una línea temporal lo más certera posible sin saber de antemano a qué año pertenecen exactamente los acontecimientos que nos toca jugar. Por ejemplo: ¿sabrías decirme qué ocurrió antes, la invención del vino o la aparición de la escritura? ¿O el primer Mundial de la FIFA o la invención del abrelatas?
Colocando una carta inicial en medio y repartiendo cuatro cartas a cada jugador, cuando llegue nuestro turno deberemos coger uno de esos acontecimientos, sin mirar la fecha en el reverso, e intentar colocarlo antes o después del acontecimiento que hay en el centro de la mesa.
Si hemos acertado, el turno salta al siguiente jugador que deberá hacer lo mismo. Si fallamos, esa carta se descarta y tocará robar una antes de saltar de turno. El primero que se quede sin cartas es el que gana, y como ya habrás podido comprobar (la invención del vino y el abrelatas son los que ocurrieron antes), conseguirlo no es fácil.
Un cooperativo perfecto para jugar con los peques
Por aquello de no frustrarnos en exceso, Timeline Twist ofrece un girito a la fórmula inicial de la mano de un modo cooperativo en el que los más torpes con las fechas podemos tener algo de esperanza. Aquí el objetivo no parte de quedarnos sin cartas, sino de apuntar a conseguir ser lo más ajustados posibles en nuestras cábalas para que nuestros errores no nos fastidien en exceso la puntuación.
En esta versión no iremos tan a ciegas porque le daremos la vuelta a la carta tras decidir cuál vamos a jugar y podremos ver en qué fecha debemos colocarla, pero para añadir algo de enjundia al sistema, el problema es que a partir de ese punto ya no podremos mover la línea temporal para colocar otra carta en medio de esas dos.
La única forma de salvar una carta entre dos años ya cerrados en la línea temporal es subirla a un punto medio entre ambas, pero sólo podremos hacerlo una vez, así que cualquier otra carta que pudiese entrar entre esas dos fechas deberá descartarse y pasará a formar parte de la puntuación negativa que nos restará puntos al finalizar la partida.
En intentar ser lo más ajustados posibles al colocar nuestros eventos en la línea temporal, y evitar que los huecos entre un año y otro nos fastidien demasiado, está la gracia de un modo cooperativo que termina siendo menos divertido que el competitivo de Timeline Twist, pero que es la mejor forma de que los más pequeños de la casa (o los desmemoriados como yo) también puedan sumarse a la fiesta.
Timeline Twist Pop Culture|Asmodee - Juego de cartas cooperativo - 2 a 6 jugadores - a partir de 8 a�os
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