'Assassin's Creed: Revelations' para PS3: primer contacto

'Assassin's Creed: Revelations' para PS3: primer contacto
Facebook Twitter Flipboard E-mail


En una generación en la que las críticas a la duración de los modos campaña o historia se cuentan por decenas, suplir esa falta con la inclusión de un modo multijugador que alargue la vida del juego se antoja imprescindible. Es un movimiento lógico y acertado en la mayoría de los FPS, pero trasladar ese espíritu a otro tipo de juegos se han convertido en un verdadero quebradero de cabeza para los creativos.

Afrontaba la beta de ‘Assassin’s Creed: Revelations’ con más cautela que entusiasmo, pues lo poco que probé del multijugador de ‘Assassin’s Creed: La Hermandad’ me dejó bastante frío. Imagino que, como a muchos, la visión templaria acabó agotando mi paciencia a los pocos minutos. No porque me matasen, tengo mejor perder, sino porque ese simple concepto arruinaba completamente la esencia del sigilo de ‘Assassin’s Creed’.

La idea era buena, pero no se premiaba la planificación de ataques todo lo que debería, por lo que para encontrar a tu objetivo bastaba con mirar al cielo y verlo saltando de un tejado a otro como alma que lleva el diablo.

assassins_creed_revelations_02.jpg

'Assassin's Creed: Revelations', mejoras de un concepto exitoso

Lo prometido a raíz del problema por parte de Ubisoft era equilibrar la balanza, premiar los taques silenciosos y las estrategias, y de esa forma acabar con la sensación de estar en un patio de colegio con gente persiguiéndose continuamente.

El cambio funciona, encontrar a objetivos y perseguidores es más difícil, y te obliga a jugar con cascos para permanecer atentos a cualquier movimiento susurro casi imperceptible. Por otro lado, poder usar nuevas trampas como las minas, o directamente aturdir a nuestros enemigos para huir con el rabo entre las piernas, le añade un componente más competitivo al multijugador.

Y decía que funciona, y lo vuelvo a repetir a la vez que lo aclaro: sólo sobre el papel o en el tutorial. Es ahí donde todos los engranajes giran en el sentido que deberían. Los mapas en cambio siguen plagados de monos saltarines y son pocos los que intentan conseguir muertes espectaculares que sumen puntos a su marcador, siendo más habituales los ataques a lo loco que no acaben con tu contador de tiempo al tener que planear tus próximos movimientos.

assassins_creed_revelations_01.jpg

Asesinos saltarines

Al fin y al cabo no les resto razón. En el tiempo que tardas en encontrar, seguir, pensar y matar a tu objetivo, otro jugador ya se ha llevado a tres enemigos por delante dando vueltas en círculos alrededor de la típica plaza donde se concentra el barullo del mapa.

Lo normal en estos casos es que se le eche la culpa a los jugadores, de la misma forma que se les echa la culpa a los campers de cualquier ‘Call of Duty’ de turno. Pero de la misma forma que Infinity Ward se ha sacado de la manga el tema de las chapas que dejan sobre el suelo los caídos (veremos si finalmente funciona todo lo bien que debería), en el multijugador de ‘Assassin’s Creed: Revelations’ se echa en falta que el castigo se anteponga a la recompensa.

Sin embargo la propuesta pinta bien, es divertida y el hecho de contar con una historia paralela que se irá desbloqueando conforme avancemos puede ser el perfecto empuje para que la guerra entre asesinos y templarios quede en algo más que una mera anécdota. Potencial, desde luego, hay. Ahora de momento toca esperar a la versión final.

Assassin’s Creed: Revelations | PS3

Assassin
  • Plataformas: PC, Xbox 360 y PS3 (versión analizada)

  • Desarrollador: Ubisoft

  • Distribuidor: Ubisoft

  • Lanzamiento: 15 de noviembre

  • Precio: 69,95 euros

   <p>La beta de Assassin&#8217;s Creed: Revelations intenta mantener la esencia de su anterior multijugador, pero consiguiendo que la competitividad esté más equilibrada y superar sus desafíos sea todo un reto.</p>

Vídeo | YouTube
En VidaExtra | ‘Assassin’s Creed: Revelations’, todo lo que necesitas saber del nuevo ‘Assassin’s Creed’

Comentarios cerrados
Inicio