He estado probando Hellblade 2 y, con solo una hora de juego, ya me ha volado la cabeza

He estado probando Hellblade 2 y, con solo una hora de juego, ya me ha volado la cabeza

Ninja Theory ha pisado el acelerador con esta secuela

3 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Hellblade 2

Desde el mismo momento de su creación, los videojuegos siempre han estado sometidos a críticas y prejuicios. Si bien a día de hoy todavía queda algún resquicio de esa tendencia, el panorama ha cambiado radicalmente y ahora ser jugador de videojuegos es lo más corriente del mundo. Pero no siempre fue así, y si nos está leyendo algún jugador de la vieja escuela, recordará el estigma al que, con casi toda seguridad, se vio expuesto por simplemente echar 5 duros a la máquina recreativa. Seguramente te preguntes porqué te estoy diciendo esto, pero de eso es de lo que va Senua's Saga: Hellblade 2: del estigma.

Tras haber podido jugar cerca de una hora, mi mente es un hervidero. La nueva entrega de Ninja Theory parece contar con un componente narrativo tan fuerte como su predecesora, Hellblade: Senua’s Sacrifice. Sin embargo, si en la primera entrega veíamos cómo la psicosis se situaba en el centro del eje, aquí iremos un paso más para explorar en el componente social de las personas con problemas de salud mental. La Senua de esta entrega, mucho más madura que antaño, emprenderá un viaje conectada con la realidad que la rodea y, si algo me ha quedado claro, es que esta puede ser tan temible como cualquier brote psicótico.

El mensaje de Senua’s Saga: Hellblade 2

Hablar de salud mental no es sencillo. La desinformación y el desconocimiento juegan en contra de todas aquellas personas que sufren de ello. Por ello, cuando Ninja Theory decidió en 2017 lanzar Hellblade, fue un movimiento arriesgado. Con ello, no solo pretendían reafirmarse como estudio al crear su propio triple A independiente, sino también poner al jugador en la piel de una persona que sufría episodios psicóticos. Así, nos encontrábamos con una entrega en la que discernir qué era real o no podía ser tan abrumador como las voces que oíamos en la cabeza de Senua.

En Senua’s Saga: Hellblade 2, que es algo más que gráficos impresionantes, nos vamos a encontrar una historia mucho más anclada a la realidad. Eso no significa que la psicosis no esté presente para alterar el entorno o susurrarnos al oído, pero vamos a tener más oportunidades de observar el mundo que nos rodea. Y esto no tiene necesariamente porqué ser más agradable.

Uno de los elementos que más me ha impresionado de Hellblade 2 es el hecho de que hay una decisión consciente de crear un juego mucho más violento y explícito. Para ello, el fotorrealismo del que se nutre es fundamental, pues consigue mostrar la depravación humana de la forma más directa. Gracias al nivel de detalle de los entornos, nos encontraremos con momentos contemplativos en los que tan solo querremos observar el mundo que nos rodea y, para ello, Unreal 5 ha tenido mucho que ver. Por ejemplo, yo llegué a un poblado con cabañas de piedra, asentamientos y un bosque despoblado alrededor. El lugar estaba vacío, por lo que, mientras me adentraba por el laberinto de escombros y madera, tuve tiempo de entrar en algunas de esas chabolas en busca de algo de interés. ¡Y vaya si lo encontré!

Hellblade 2

En realidad el lugar no estaba vacío: dentro de cada uno de los hogares, la visión de cuerpos mutilados y llenos de sangre inundaba cada rincón. Si avanzaba un poco más, podía ver un cuerpo empalado a la entrada de un puente. Por lo menos en lo que vi, las visiones de Senua parecían mucho más agradables con cristales fractales que aparecían por todas partes y formas psicodélicas. Incluso las voces de vez en cuando susurraban algo positivo o trataban de ayudarme cuando no sabía resolver un puzle. Además, cuando Senua estaba conectada con la realidad, en muchas ocasiones tenía que enfrentarse contra enemigos, espada en mano, y acabar con ellos para conseguir rescatar a su gente en un combate que, a grandes rasgos, se siente mucho más fluido y orgánico que en la entrega anterior. Curiosamente, cuando menos brutalidad he sentido ha sido durante ellos, ya que, aunque tienen un componente algo menos fantasioso, el uso de la mecánica del espejo hace que aparezcan estos cristales a la hora de derrotar a los enemigos y rebaje un poco el nivel de explicitud.

Con esto no estoy queriendo decir que experimentar un episodio psicótico sea agradable. No me malinterpretéis. Pero el contraste que nos pone delante el estudio sí que me ha llevado a reflexionar acerca de lo que os decía en un primer momento: el estigma. ¿Por qué vivimos en un mundo en el que tenemos a una persona con un problema de salud mental pero, sin embargo, tenemos normalizados conceptos como la guerra? En Hellblade 2, el mundo que rodea a Senua puede ser más temible que sus propios síntomas, y eso no hace bueno a lo que ella sufre, pero sí que nos pone delante una realidad: no sabemos nada.

"Las personas con problemas de salud mental suelen sufrir más por el rechazo que por los propios síntomas", nos comentaba el profesor Paul Fletcher, asesor del estudio en materia de salud mental. Y si bien en la primera entrega veíamos cómo Senua se embarcaba en un viaje para recuperar a su amor, con las cargas emocionales y revelaciones que esto conllevaba, aquí tendremos que romper los muros que nos separan de la gente que nos rodea. Si lo consigue o no, es algo que tendremos que ver el próximo 21 de mayo cuando el juego se lance para PC, Xbox Series X y Xbox Series S.

Ahora bien, yo me pregunto: si en apenas una hora he podido entender este mensaje, ¿qué más nos tiene reservado Senua’s Saga: Hellblade 2? No me cabe duda de que el estudio ha querido ofrecer una secuela a la altura de su predecesora, que no necesariamente tiene porqué ser más grande, pero sí más ambiciosa. Al fin y al cabo, hablamos de uno de los grandes lanzamientos del ecosistema de Xbox para este año y, al menos de momento, parece ser que este no nos dejará indiferente.

En VidaExtra | Juan Fernández, director de combate de Hellblade: "Si siguiera haciendo videojuegos en España, estaría en una frutería"

Inicio