En el mismo evento de Konami en el que pude probar durante una hora la colección de clásicos de Metal Gear Solid y el divertido juego musical Super Crazy Rhytm Castle, también hubo hueco para un juego completamente diferente y enfocado en su totalidad a la acción totalmente desenfrenada y alocada, siendo esto lo que más caracteriza a Cygni: All Guns Blazing.
Este espectacular shoot'em up a cargo del estudio KeelWorks también fue una sorpresa muy agradable, aunque es de los juegos más difíciles que me he encontrado desde hace mucho tiempo, hasta el punto de alcanzar unos niveles un tanto absurdos por lo infernal que se volvía la jugabilidad en cuestión de pocos minutos. A pesar de esto último, os voy a contar por qué no deberíais de perderlo de vista.
Una acción que no cesa ni por asomo en ningún momento
La jugabilidad de Cygni nos devuelve por completo a los míticos shoot'em ups arcade de scroll vertical en los que la única finalidad es la de disparar por completo a todo lo que se mueva por la pantalla. Sobre el argumento no puedo profundizar demasiado porque en esta versión de prueba no pude ver demasiado acerca de este apartado en concreto.
Lo único que se muestra al principio de cada nivel es una cinemática muy espectacular, como por ejemplo una de las primeras en la que una chica, probablemente la protagonista, aparece conduciendo la nave que controlamos en todo momento. A partir de ahí comienza el festival de tiroteos en el que la acción no parece tener fin desde el primer segundo hasta que se completa la fase entera.
Antes de todo eso se puede seleccionar varios niveles de dificultad y el que aparecía por defecto era el más fácil, pero ni por asomo era pan comido. Son tantos los enemigos que desfilan por todas partes que resulta imposible llegar a contarlos, aunque el mayor problema de todos es que se ponen a atacar a una velocidad descomunal y de forma despiadada.
No es que el juego esté preparado para tener unos nervios de acero y que puedas esquivar todo lo que se te viene encima, porque tiene toda la pinta de que la mecánica está diseñada de una forma que sea inevitable acabar recibiendo impactos sin parar. Por suerte no quiere decir que de un solo golpe la nave se destruya, como sucede en otros títulos similares, porque aquí podemos echar mano de unos escudos totalmente indispensables para sobrevivir.
A medida que los enemigos van siendo eliminados van soltando energía que sirve para recargar los escudos, de ahí que no haya que dejar títere con cabeza con tal de no pasarlas canutas. Por otra parte, esta misma energía se puede almacenar para reforzar la protección de nuestra nave o por el contrario invertirla en las armas para hacer que se vuelvan más demoledoras, dependiendo ahí de las preferencias de cada uno.
Aun así, si en el nivel más fácil ya me pareció todo un infierno mantenerme con vida, no me quiero ni imaginar cómo debe de ser en el nivel más alto de todos. Además, el problema es que al morir no empiezas desde donde te han matado, sino al principio, a lo que hay que sumar que las fases tienen una duración media de entre 10-15 minutos, lo que supone que haya que esforzarse más todavía en sobrevivir a toda costa para no tener que rehacer todo.
Colosales jefes finales contra nuestra nave totalmente personalizable
El nivel gráfico de Cygni es brutal, con unos efectos que provocan que, más allá de por el hecho de sobrevivir, no quieras apartar la mirada de todo lo que tienes ante ti por lo impresionante que se ven los disparos, los enemigos o el propio escenario. No obstante, en esta versión de prueba solo se podían jugar tres fases y hay que reconocer que la ambientación de ellas era demasiado similar, dificultando el hecho de diferenciar unas de otras.
Lo que sí es exclusivo de cada una son los jefes finales que van apareciendo sobre la marcha, porque no es uno solo el que hay que vencer para pasar a la siguiente fase, sino que son varios los que van surgiendo. Estos enfrentamientos sí que me encantaron por el reto que presentaban y por el hecho de que a nivel artístico son alucinantes con unos tamaños colosales.
Asimismo, otro detalle a destacar es que la acción por lo general transcurre en el aire, pero la nave dispone de unos disparos para atacar al suelo, algo que tuve que llevar a cabo precisamente contra una bestia mecánica con varios tentáculos que salían desde el agua y que había que ir eliminando para machacar al cuerpo principal situado en el aire.
Y ahí no quedan todas las capacidades de la nave, porque en el menú principal se pueden adquirir infinidad de mejoras que sirven para potenciarla considerablemente. En esta versión de prueba pude aumentar prácticamente todos los aspectos, algo que sin duda lo noté una barbaridad porque las fases se volvieron francamente más asequibles en el mismo nivel de dificultad.
En definitiva, Cygni me ha parecido todo un juegazo dentro de los shoot'em up y al que hay que seguirle la pista muy de cerca. Entre otras características nos contaron que tendrá un multijugador cooperativo para dos personas, pero no tuve la ocasión de ver cómo era, así que un motivo más para esperar con ganas el lanzamiento de este espectacular título, por muy bestial que sea su dificultad en ciertos momentos.
- Plataformas: PC, PS5 (versión jugada) y Xbox Series
- Multijugador: Sí (1-2)
- Desarrollador: KeelWorks
- Compañía: Konami
- Lanzamiento: 2023
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