El éxito del juego en la nube le ha causado un enorme disgusto a Microsoft, pero eso no impide que veamos cada vez más sistemas de videojuegos anunciados. Algunos de sobremesa, otros portátiles y cada vez hay más que quieren ser las dos cosas a la vez. Y pese a que la ventaja del juego en la nube es que no dependes del hardware, y eso juega a su favor, necesitarás presionar unas 10 millones de veces un botón de la Asus ROG Ally antes de que éste empiece a ceder. ¿Un dato sobre el papel o una cifra inventada? Ni lo uno, ni lo otro. Es el fruto de la evolución a la hora de crear hardware de videojuegos.
El último vídeo compartido por Asus de cara a su sistema de videojuegos portátil es tan repetitivo y largo como fascinante: se ha mostrado el proceso entero de testeo de durabilidad de los botones y sticks del ROG Ally, garantizando que cada botón funcionará correctamente al ser pulsado 10 millones de veces. Eso da para muchísimas partidas a Dead Cells. Y ahí no acaba la advertencia: sus joysticks deben de ser capaces de girar 2 millones de veces.
Como es lógico, ninguna persona se dedicó a presionar esa absurda cantidad de veces cada botón.
El testeo y ensamblaje de los sistemas de videojuegos se ha convertido en una parte crucial dentro del desafío de darles forma. En muchos aspectos, un factor extremadamente determinante para su éxito. El vídeo con el que Sony nos mostraba cómo era la PS5 por dentro, no mucho antes de que se pusiese a la venta, hoy mostraría nuevos componentes y cambios significativos.
Dicho lo cual, si Sony hubiese ensamblado cada PS5 usando el mismo proceso que Yasuhiro Ootori usó para mostrar sus componentes, piezas y proceso de desmontaje, el proceso de manufactura habría sido interminable.
Eso no quiere decir que no se aporte cierta flexibilidad, que conste: Valve fue transparente con Steam Deck y su filosofía estaba clara desde el principio: es un pc ya montado y que puedes disfrutar como una consola y, por extensión, puedes mejorar o reparar sus partes por tu cuenta si lo deseas.
Lógicamente, su garantía no cubre cualquier cosa que se nos ocurra.
Pero volvemos a la pregunta original: cómo es el proceso de ensamblaje y testeo del hardware actual y cómo se ha hecho hasta ahora. Ya hemos visto cómo se realiza la prueba de resistencia de los botones de la Asus ROG Ally, pero mucho antes de que a Gabe Newell lanzase su propia máquina (no tenemos en cuenta las Steam Machines), existió una de sus primeras incursiones con el hardware: el mítico Steam Controller.
Y el proceso de ensamblaje casi automatizado y modular de estos mandos, por cierto, es realmente fascinante: desde la forma en la que se da forma a la carcasa a cómo se colocan botones y se sellan los acabados, pasando por la serigrafía de las crucetas táctiles o la comprobación de la rotación integral de los sticks.
El proceso de producción de los Steam Controllers era integral, de modo que en la misma infraestructura que se ensamblaban las piezas se preparaba el embalado y el empaquetado de mandos.
¿El truco para lograr este nivel de precisión? Desarrollar el hardware en paralelo al proceso de fabricación, apostando fuertemente por líneas de ensamblaje automatizadas. Según Valve, de hecho, una de las líneas de ensamblaje totalmente automatizadas más grandes de los EE. UU., aunque adelantó que había humanos controlando el proceso.
Aquí puedes ver los mandos construidos completamente por robots. Sin embargo, no estamos locos, por lo que los humanos todavía están disponibles para evitar que los robots se vuelvan más sensibles de lo deseado.
Y pese a que el resultado es bastante satisfactorio y eficiente, es toda una consideración que haya personas echándole un ojo al proceso. Sobre todo, teniendo en cuenta que estamos hablando de la compañía que creó a GLADOS.
Los procesos de fabricación de consolas: ciencia, arte y un poquito de magia
Puede que Nintendo Switch le esté pisando los talones a la PlayStation 2, pero hasta la fecha es la sobremesa de videojuegos más vendida de la historia. ¿Alguna vez te has preguntado cómo se fabricaron tantas unidades?
El proceso no fue tan organizado como el del mando de Steam, pero definitivamente se trataba de una cadena de producción muy curiosa de ver en la que las placas de la consola se creaban de manera automatizada mientras que los acoplamientos se realizaban de manera manual por técnicos y especialistas.
Lógicamente, todas las consolas no se crean en un mismo sitio. Por poner un ejemplo, buena parte de las PS3 fueron manufacturadas en Manaos, en Brasil, siguiendo un proceso muy parecido al de las otras fábricas del mundo.
Llegados a este punto toca abordar el verdadero gran proceso: cómo ese conjunto de placas, cables y tornillos acababa embalado y presentado en una estantería. Bueno, tal y como puedes ver a continuación, la metodología que se usaba en las Xbox originales, en 2002, es un ejemplo perfecto de cómo se hacía un proceso más o menos completo, pasando por la envoltura hasta llegar a la caja.
Un proceso que fue perfeccionado de cara a su sucesora, la Xbox 360. De modo que tenemos una idea de cómo se fabricaban las consolas de séptima generación.
Y ojo, que en el vídeo que puedes ver a continuación además se vé cómo es el proceso de prueba de los mandos, el software, y hasta la respuesta de la alimentación. ¿Quién no se acuerda del dichoso anillo de la muerte?
No solo importan las máquinas: el valor de los juegos
A partir de aquí solo queda un tema a tratar: ¿El proceso siempre fue así? En el siguiente vídeo puedes ver por tí mismo cómo Nintendo producía las míticas NES en Estados Unidos durante el año 1990. Aquello no tenía nada que ver con el mando de Steam.
Sin embargo, lo verdaderamente significativo de este último documento venido del pasado es que Nintendo no solo se preocupaba de ensamblar el hardware, sino que estaba plenamente volcada con el software: en una enorme sala había un pequeño ejército de jugadores exprimiendo cada juego que pasaba por sus manos y haciendo anotaciones y correcciones.
Los mandos de la NES quizás no tenían tanta tecnología, pero la clave del éxito de la Gran N siempre ha estado en sus juegos.
De hecho, y pese a que a día de hoy el mercado digital se impone holgadamente al físico, no podíamos ponerle el broche a nuestro repaso sin hacer una última parada: cómo se producen y crean las copias de los juegos. Al menos, las que son en formato disco. La respuesta la tienes aquí bajo la forma de un lote de juego para PS4 que están a punto de llegar a las estanterías.
Quizás llegue el día, -en décadas, siglos o un par de años- en el que el juego en la nube elimine todos estos procesos de fabricación y distribución. O puede que no. Pero hay algo que tenemos muy claro: por muy minimalistas que seamos, siempre merece reservar un poquito de espacio para una máquina al lado de nuestra pantalla favorita.
Ya bien sea para la siguiente genialidad de Nintendo, Microsoft, Sony o SEGA, como para cualquiera de estas consolas que hoy son totalmente atemporales. ¿Y quíen sabe? Quizás alguna de las máquinas que te hemos mostrado esté hoy en tu casa.
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