Crearse unas altas expectativas con un producto suele ser, casi siempre, algo contraproducente. Pero a veces es inevitable no dejarse llevar por el entusiasmo. Mi compañero Alex y yo esperábamos algo muy grande de Tequila Works y su ‘Deadlight’. Queríamos que así fuese con todas nuestras fuerzas, pero lamentablemente nos hemos llevado un chasco. Visualmente es una maravilla, es algo innegable, pero su duración y algunas lagunas en el control hacen que la experiencia de juego se vea seriamente afectada. Que haya conseguido el 100% del juego en poco más de 2 horas no dice mucho a su favor.
Esto tampoco se traduce en el sentimiento de que sea rejugable más allá de experimentar los tres minijuegos, a modo de consolas portátiles Game & Watch, que están ocultas en ‘Deadlight’, lo cuál no deja de resultar un detalle meramente anecdótico. ¿Mola? Sí. ¿Es suficiente? No. Aparte que la sensación general que nos deja este juego es que resulta bastante sencillo completarlo, salvo por dos o tres coleccionables. Nada más. Los más difíciles, probablemente, sean para muchos las consolas portátiles, de ahí que os ofrezcamos ahora una pequeña pero útil guía con sus ubicaciones.
Raven Thunder’s Rock Legend – Bienvenido a Seattle
La primera consola portátil la podremos conseguir muy pronto. En la segunda parte del primer acto, en la parte llamada “Al final del túnel”. Tan pronto lleguemos al túnel de mantenimiento y las Sombras se caigan por el precipicio intentando darnos caza, tendremos que bajar por las escaleras, pero sin dejarnos caer, ya que casi al final de éstas veremos otro túnel al que podremos acceder mediante un simple salto. Examinamos el cadáver y ya está, tendremos nuestra primera consola portátil.
En Raven Thunder’s Rock Legend veremos un sucedáneo del ‘Guitar Hero’ con unos controles bastante simplificados. Tanto con el stick analógico izquierdo como con la cruceta moveremos al guitarrista de izquierda a derecha, y con el botón ‘A’ tocaremos. El objetivo es sumar el mayor número de puntos posibles, y para eso tendremos que tocar cada nota justo cuando esté encima nuestro.
Spot Daisy – Cazadores
Para la segunda tendremos que esperar casi hasta el final del segundo acto, en concreto hasta la parte llamada “Playoff”. En vez de ir directamente a salvar a cierta persona tendremos que tomar el camino opuesto hacia la derecha del estadio, subiendo por las primeras escaleras de un salto en carrera. Para las segundas tendremos que mover una estantería y trepar por ella. Seguimos subiendo un poco más, y para cruzar a la parte superior izquierda tendremos que disparar a un candado para que bajen unas escaleras de mano. Avanzamos un poco más y tendremos que correr por la pasarela más larga (o bien agarrándonos del cable superior) hasta dar con la penúltima zona. Damos un salto a la última plataforma y allí está nuestra segunda consola portátil entre las cajas. No ha sido tan difícil, ¿verdad?
En Spot Daisy nuestro objetivo será tonificar nuestros músculos mediante una sesión de aerobic con una profesora que no parará de darnos indicaciones: mover el brazo izquierdo (LB), mover el brazo derecho (RB), mover la pierna izquierda (LT), mover la pierna derecha (RT). Lo divertido viene cuando mezcla dos extremidades a la vez, llegando a ver hasta tres e incluso cuatro de golpe. Lo normal al principio es pifiar alguna que otra cuando se juntan dos o tres extremidades, siendo un minijuego bastante más divertido de lo esperado, aparte de resultar bastante irónico para un juego de zombis.
Madness Station – La Nueva Ley
Finalmente, la tercera y última consola portátil la veremos en la segunda parte del último capítulo, la llamada “Caídos en combate”. Será casi al final de esta parte, nuevamente tras pasar por otra zona que se derrumba y en la que podremos ver un misil nuclear. En el último salto importante en el que nos agarraremos a unas escaleras, tras hacerlo, deberemos soltarnos para agarrarnos a un saliente. La cámara se alejará un poco y nos descubrirá la zona oculta en la que obtendremos la citada portátil.
En Madness Station nuestro objetivo será detener a los cultistas espectrales con nuestra linterna. Nos moveremos por las dos pantallas, por lo que habrá que estar más atento que en los otros minijuegos. Si fallamos y los cultistas consiguen encender varias velas invocarán al mismísimo Cthulhu. Y no queremos que eso suceda, ¿verdad? Aunque con la curiosidad, ya se sabe…
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