Xbox canceló un exclusivo en el que los creadores de Star Wars: X-Wing cambiaban las naves espaciales por caballitos de mar

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Si uno se decide a escarbar entre el pasado del mundo del videojuego, se puede encontrar joyas inesperadas. Esto es precisamente lo que han hecho desde Axios con Knights of Decayden, un título exclusivo de Xbox que nunca llegó a ver la luz por parte de Totally Games, creadores de Star Wars: X-Wing.

El nombre inicial fue Archipelago y el núcleo central de la experiencia nos hacía combatir en batallas aéreas a lomos de caballitos de mar voladores. Exactamente, y todo transcurriendo en un mundo de fantasía, monstruos, luchas con lanzas y peleas submarinas. De hecho, el medio ha compartido imágenes inéditas.

Los planes para la obra eran ambiciosos, incluyendo islas hasta donde alcanza la vista en un mar enorme y con una historia jugable tanto en solitario como en compañía. En 2001 se esperaba que llegase al mercado, un año después de la llegada de la primera Xbox y representando a Studio X, un sello que marcaba la colaboración entre Microsoft y estudios externos.

Con todo, en 2002 se dio carpetazo al proyecto y Larry Holland, fundador de Totally Games, aporta las claves de lo que sucedió:

"Acepté un cronograma muy agresivo. Probablemente más por razones financieras y para evitar que mi organización y mi empresa tengan que despedir a un montón de gente. No habíamos solucionado todos los problemas con respecto a la escala, la velocidad y el cuerpo a cuerpo"

Knights of Decayden estaba todavía muy verde incluso cuando se canceló por aquellas fechas y el anuncio del cierre fue "desmoralizante" para el equipo. Phil Spencer recordó todo este asunto en el medio, relatando que lo primero que tuvo que hacer al unirse a Xbox fue cancelar el título.

Ahora lo único que queda es un archivo en casa de Holland el cual contiene una versión jugable, pero que no ha visto la luz. A lo que sí podemos echar un vistazo es a una serie de capturas y artes conceptuales, en lo que es poco menos que el vago recuerdo que ha quedado.

Imagen| Unseen 64 (CC BY-SA 4.0)

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