La saga Fire Emblem ha pasado por Nintendo Switch con dos videojuegos diferentes. Primero fue con Fire Emblem Warriors, con el que los personajes de toda la franquicia se reunían para meterse de lleno en unas batallas de acción pura y dura en este estupendo musou, mientras que Fire Emblem: Three Houses retomaba la jugabilidad clásica de la saga con el que sin duda es uno de sus mejores títulos y de todo el catálogo de la consola.
Ahora Nintendo se ha vuelto a unir a Koei Tecmo y Omega Force para unir estos dos juegos en uno solo con Fire Emblem Warriors: Three Hopes, el próximo musou que saldrá a la venta en Nintendo Switch y otro de los grandes juegos que recibirá la consola este mes junto con Mario Strikers: Battle League Football. Por nuestra parte hemos tenido la ocasión de probar un completo adelanto y vamos a contaros todo lo que podéis esperar en nuestras primeras impresiones.
Preparándonos a fondo con los héroes de Fódlan
Por todos los vídeos que se han ido publicando hasta la fecha resultaba un tanto extraño que cierto personaje se convirtiese en el villano del juego, pero en realidad todo tiene sentido porque estamos frente a una historia alternativa del universo de Fire Emblem: Three Houses. Por suerte, eso mismo implica que no es necesario haber jugado al título original, aunque tampoco sería mala idea en absoluto, porque así se disfrutará bastante más todo lo que sucede a lo largo de la trama.
Sobre todo porque todos los personajes que irán apareciendo son exactamente los mismos, con Edelgard, Dimitri y Claude a la cabeza, los líderes de las Águilas Negras, Leones Azules y Ciervos Dorados, respectivamente, quienes a su vez estarán acompañados por todos sus aliados, como por ejemplo Hubert, Dedue, Lorenz y el resto de guerreros importantes. Además, todos serán personajes jugables para que podáis controlarlos durante las batallas, de manera que la jugabilidad no se limitará únicamente al protagonista.
Dicho sea de paso, esta vez no será Byleth el protagonista, sino un nuevo mercenario/a llamado Shez, con el que no tardaremos en tomar una decisión crucial para la campaña, ya que deberemos unirnos a una de las tres casas mencionadas previamente. Por lo tanto, esto supone que habrá un total de tres campañas diferentes para completar, lo que sin duda le otorga al juego una enorme rejugabilidad para descubrir todos y cada uno de los detalles de las diferentes historias, ya que las misiones tampoco serán las mismas.
Por otro lado, también se nota que bebe de Fire Emblem: Thee Houses en la infinidad de conversaciones que mantendrán los personajes entre batalla y batalla, para planear estrategias y comentar los últimos sucesos que han tenido lugar, algo que resulta raro para tratarse de un musou porque no es habitual el presenciar tantísimos diálogos, pero no hay que olvidar que estamos frente a un nuevo Fire Emblem, así que tiene sentido y a su vez le brinda un mayor interés a la trama principal.
En otro aspecto en el que notaremos que ha tenido gran influencia es en el campamento principal que recorreremos tras cada batalla que superemos. Este lugar es el principal en el que descansaremos, pasaremos el rato hablando con nuestros compañeros de armas y donde también mejoraremos todos los aspectos de nuestro ejército. Más allá de hablar con todos ellos, habrá ciertas actividades para realizar que dispondrán de un límite de usos, de manera que hay que participar en una nueva batalla para recargar estos puntos. Así podremos aumentar poco a poco la afinidad que mantienen unos con otros, lo que a su vez servirá para fortalecerles en el momento de la verdad cuando se enfrenten a los ejércitos rivales.
Por ejemplo, podremos preparar deliciosos platos de comida, cuidar de los caballos o invitarles a que participen en entrenamientos para que suban de nivel. Cada uno podrá decidir qué aspectos quiere enfatizar, ya sea por las necesidades o simplemente por querer que ciertos personajes en particular estrechen un fuerte lazo en sus relaciones.
Por lo demás, desde la base iremos a parar a las distintas batallas principales, así como las secundarias. De hecho, estas últimas serán determinantes porque son las que nos permitirán avanzar en las misiones de la historia para progresar en ella, lo que a su vez nos hará entregas de recompensas de todo tipo a medida que vayamos saliendo victoriosos y ocupando más terreno del mapa con las bases que vayamos conquistando.
Unas multitudinarias batallas con un toque de Fire Emblem
En el momento de pasar a la acción habrá infinidad de aspectos que os resultarán muy familiares si habéis jugado a otros musou, porque el objetivo es el de siempre, el de plantar cara cientos de enemigos al mismo tiempo, con sus líderes y personajes clave que nos desafiarán a darlo todo para acabar con ellos. Eso sí, los enemigos normales no suponen un reto alguno y básicamente están ahí para que les machaquemos sin ningún tipo de contemplaciones.
A medida que vayamos progresando en la historia iremos desbloqueando más personajes para controlar, hasta un máximo de cuatro en una misma fase. La forma de jugar con todos ellos será idéntica, aunque no todos atacarán de la misma forma, ya que dependerá del arma que utilicen en base a su especialidad y la clase que tengan asignada, aunque esto también es posible modificarlo más adelante cuanto más vayamos progresando en la aventura y les vayamos subiendo de nivel.
En la pantalla de inicio de la misión podremos configurar todos estos detalles, así como la zona en la que desplegaremos a cada uno, el equipamiento que llevará encima y consultar los distintos objetivos a cumplir, que en la mayoría de situaciones consistirá en acabar con algún enemigo especial en concreto. Lo cierto es que esto no es más que una simple excusa para liarnos a espadazos, hachazos y demás con los ataques normales u otros especiales a los que iremos dando rienda suelta.
En este sentido, los personajes irán desbloqueando habilidades especiales que tendrán un límite de usos dependiendo del arma que estén empuñando. Asimismo, también influirá en la barra de protección de los enemigos más resistentes, porque ahí no bastará con utilizar el arma que sea, porque puede darse el caso de que no causemos prácticamente ningún daño o le hagamos morder el polvo en un santiamén si escogemos al personaje adecuado, de manera que sería oportuno escoger a un grupo equilibrado antes de partir a la acción.
Y mucho ojo a las relaciones que mantengan los campeones, porque esto también provocará que su daño o los ataques especiales combinados causen una auténtica destrucción si su afinidad es muy alta. Así pues, en resumidas cuentas, no todo será pegar sin más, dado que la jugabilidad cuenta con una enorme profundidad que iremos viendo poco a poco con más detalle de cara a la versión final.
Por el momento Fire Emblem Warriors: Three Hopes se presenta como un título que no deben perder de vista todos aquellos que les encanten los musou y que les haya conquistado Fire Emblem: Three Houses. Personalmente, estoy deseando volverme a meter de lleno en sus batallas para seguir avanzando en su más que interesante trama y descubrir qué más sorpresas me deparará.
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