Si buscas una excusa para mandar al carajo a tu pareja, familia o amigos, este juego es la mayor fuente de  broncas que he probado

Si buscas una excusa para mandar al carajo a tu pareja, familia o amigos, este juego es la mayor fuente de broncas que he probado

Un juego de mesa familiar cargado de piques que es tan fácil de entender como divertido de jugar

Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
The Island

Es increíble que con todos los años que tiene a sus espaldas, si no recuerdo mal su primera versión data de 1982, aún no me hubiese acercado al tremendo juegazo que ha resultado ser The Island (Survive: Escape from Atlantis! En su versión internacional). Hacía mucho tiempo que un pique en familia no escalaba como lo ha hecho este.

De 2 a 4 jugadores y con partidas de unos 45 minutos, The Island es uno de esos juegos en los que el fastidiar a los rivales acaba siendo tan importante como buscar tu propia gloria.

Pero lejos de estar ante el quiero y no puedo al que se enfrentan muchos juegos de este estilo, su gran baza es ser un maestro en lo de ponerte en bandeja constantemente la dualidad entre querer ser el mejor jugador de la partida, o aspirar a ser el más asqueroso de todos.

Qué es The Island

La premisa de The Island es que estamos en una isla que se está viniendo abajo por culpa de la erupción de un volcán. Si no escapamos de ella llegando a tierra firme en una de las islas colindantes antes de que ocurra, todos nuestros exploradores también se irán al fondo del mar.

El girito no está en que cada uno de nuestros exploradores tenga una puntuación distinta que sólo nosotros conocemos, lo que hace que algunos de ellos puedan servir de cebo para intentar engañar al contrario, sino el hecho de que las penalizaciones que hay alrededor del tablero sean, a la vez, completamente aleatorias y también una estrategia cooperativa cuidadosamente calculada.

Asmodee The Island - Juego de Mesa en Español, 8-99 años

Lo mejor de todo es que, en un juego en el que hay implicados factores tan diversos como la subida del agua, el control de todos esos exploradores, barcas que se mueven de aquí para allá transportando a estos últimos, tiburones en busca de carnaza, ballenas con fijación en los barcos, serpientes de mar que arrasan con todo, y una isla que se va hundiendo pedacito a pedacito, generando con ello otro sinfín de posibilidades, en realidad es un juego facilísimo.

Tanto, que incluso mi hijo de ocho años fue capaz de pegarme varias palizas de las que aún me estoy recuperando y siguen haciéndome replantear si debería desheredarlo o no. A fin de cuentas detrás de esa fijación con reventarme todas las barcas posibles sacrificando su partida en el proceso probablemente deba haber un significado oculto.

Cómo se juega a The Island

Con cuatro pasos por turno, la cosa va más o menos así. En primer lugar utilizamos las fichas especiales que podamos tener en nuestra mano (luego vamos a ello, pero es un paso más importante de lo que podría parecer durante los primeros compases de la partida).

The Island

En segundo lugar movemos a nuestros exploradores, o barcos, un total de tres casillas. Podemos mover a placer cualquiera de esos exploradores hasta un total de tres movimientos, y puede ser dos casillas para este explorador y una para esta barca o lo que creamos conveniente, pero lo haremos bajo dos condiciones.

La primera norma es que sólo podemos mover aquellos barcos en los que seamos mayoría o una cantidad equitativa al resto de tripulantes (si no hay nadie sobre ella podemos moverla a placer), y la segunda es que siempre que uno de nuestros exploradores esté tirado en el agua, sólo podrá moverse a nado una casilla por turno.

El tercer paso de nuestro turno sirve para hundir una parte de la isla, primero para la secciones de arena adyacentes al agua (sin importar si hay algún explorador encima o no), después las de bosque, y por último las de montaña.

La gracia está en que al darle la vuelta a cada una de estas secciones, debajo podremos ver una indicación que puede resultar en acciones inmediatas, por ejemplo colocar en ese hueco un tiburón que automáticamente se comerá al explorador que haya podido caer al darle la vuelta al segmento, o acciones que podremos utilizar de forma inmediata, bajo ciertas condiciones, o a posteriori. ¿Recordáis aquella primera parte del turno?

The Island

Y por último tirar el dado mediante el que podremos mover los tiburones, ballenas o serpientes marinas que hayan en juego y que, en ese mismo orden, se comerán a exploradores que vayan a nado, eliminarán a los barcos, o destrozarán a la vez barcos y exploradores.

Sólo aquellos exploradores que hayan conseguido llegar a las islas que hay alrededor del tablero serán los que cuenten para la puntuación final cuando ya no queden más exploradores o, al darle la vuelta a las casillas de tierra, aparezca la del volcán que zanjará el destino de la isla.

Aunque se disfruta mucho más a cuatro jugadores que a dos, la dinámica de darle el mismo peso a buscar la gloria que a fastidiar a los oponentes es el ejemplo perfecto de cómo este juego lleva desde 1981 ganando nuevas versiones y expansiones. El secreto de su éxito es que, a riesgo de perder a tu pareja, familia o amigos en uno de esos antológicos piques, lo cierto es que The Island es un juego divertidísimo.

Asmodee The Island + Expansión - Juego de Mesa en Español

Inicio