Análisis de Call of Duty: Warzone, uno de los mejores y más novedosos battle royale que hemos jugado

Análisis de Call of Duty: Warzone, uno de los mejores y más novedosos battle royale que hemos jugado

12 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Warzone

¿Quién decía que no se podía seguir innovando en el terreno de los battle royale? El género está lejos de haber llegado a la saturación, pese a que los constantes bombardeos de juegos como Fortnite o Apex Legends a través de sus novedades continuas puedan darnos la impresión contraria, y Call of Duty: Warzone ha entrado con fuerza. Y gratis.

Teníamos el precedente de Blackout en Call of Duty: Black Ops 4, por lo que nadie esperaba encontrarse con un battle royale malote en Call of Duty: Warzone, pero también es cierto que nos ha sorprendido gratamente por un montón de detalles: mecánicas, fluidez y hasta que desde el primer día llegara con un segundo modo de serie llamado Botín que ha resultado ser una maravilla.

Pero vayamos por partes.

Un vistazo a…
Call of Duty: Warzone - Tráiler de lanzamiento

Call of Duty: Warzone y su particular modo de entender el battle royale

El modo battle royale parte de la premisa básica del género: te dejan caer desde el cielo a un terreno de grandes dimensiones, hay un círculo que delimita la zona segura y que se va cerrando con el tiempo (en este caso formado por gas tóxico), y una vez con los pies en la tierra firme toca buscar equipamiento como armas, escudos corporales y equipo táctico (granadas de todo tipo, cócteles molotov y demás). Estos objetos suelen estar por el suelo o en cajas que podemos abrir. Y hasta aquí más o menos todo funciona igual que en los títulos más conocidos tipo Fortnite, PUBG o Apex Legends, pero desde el primer momento ya encontramos una diferencia importante: por defecto vamos armados con una pistola.

Eso significa que en caso de encontrarnos con un enemigo nada más aterrizar tenemos la opción de enfrentarnos a él con algo más que los nudillos. Y esto enlaza directamente con la principal novedad con respecto a los otros battle royale: la posibilidad de volver a la partida si nos eliminan sin depender de ningún compañero. Si es tan fácil morir nada más entrar, dado que los personajes van armados, qué menos que no nos manden a la pantalla de menú tan pronto.

Hay otra mecánica nueva que también puede tener efectos tras el primer salto desde el avión: si después de desplegar el paracaídas lo cortamos para descender más rápido, gracias a la pistola que llevamos por defecto podemos apuntar y disparar antes de tocar tierra firme. Una locura. Pero tranquilos, el paracaídas se puede volver a desplegar para no morir del batacazo.

Warzone

Cuando hablaba sobre la posibilidad de volver a la partida tras morir sin depender de ningún compañero me refería al gulag. En Apex Legends hay unas estaciones en las que un compañero de equipo puede insertar nuestra tarjeta cuando morimos y devolvernos a la partida. En Fortnite añadieron las furgonetas de reanimación, que funcionan exactamente igual. En Call of Duty: Warzone no dependemos de que un compañero nos reanime al morir, sino que iremos a parar a un gulag del que deberemos salir matando a un enemigo que está allí encerrado en la misma situación. Es un enfrentamiento seco en el que apareces con un arma aleatoria y ya te buscarás la vida para ser tú el que quede en pie de los dos.

Pero Call of Duty: Warzone no se queda ahí. Si no sales del gulag con vida, entran en juego tus compañeros. Si alguno de ellos tiene el dinero suficiente podrá devolverte a la partida gastándolo en una de las muchas estaciones de suministros que hay repartidas por el mapa. El sistema en su conjunto es una agradable vuelta de tuerca al del resto de battle royale que en la práctica funciona y añade tensión a la partida. El gulag es un lugar asfixiante y los nervios se disparan.

Hay más novedades, como por ejemplo la existencia de diversos tipos de contratos repartidos por todo el mapa que nos permiten ganar dinero. Unos dólares que luego se pueden gastar en las citadas estaciones de suministros no sólo para reanimar a compañeros caídos, sino para comprar objetos e incluso ventajas por rachas de bajas. Entre esas ventajas está el UAV para conocer la posición de los enemigos cercanos sobre el mapa, pero también hay torretas y ataques aéreos, por ejemplo.

Así es el divertidísimo modo Botín

Por otro lado, además del battle royale, este Call of Duty: Warzone incluye un segundo modo llamado Botín que ha resultado ser una agradable sorpresa. No porque sea algo nunca visto en otros juegos, sino por lo bien que encaja en el conjunto y por lo tremendamente divertido que puede llegar a ser. Es el típico modo en el que si entras con dos amigos más (los equipos, tanto en battle royale como en botín, son de tres jugadores como máximo) puedes acabar con dolor abdominal de tanto reirte.

En Battlefield: Hardline había un modo de este tipo e incluso las mecánicas de la Zona Oscura de las dos entregas de The Division me vienen a la cabeza. Básicamente se trata de amasar la mayor cantidad de dinero en equipo y extraerlo en unos helicópteros que hay que llamar desde unas zonas determinadas.

El dinero se encuentra repartido por el suelo y por las cajas y viene en distintas cantidades, así que basta con ir entrando a los distintos edificios e ir cogiendo más y más dólares. O cumpliendo contratos, como en el modo battle royale. Pero ojo, cuando te matan pierdes una parte del dinero que llevabas encima y te lo pueden robar. Hay una segunda forma de asegurar tu dinero: metiéndolo en unos globos que se pueden comprar y que a veces también salen en cajas normales.

En el modo Botín no se aplican las reglas básicas del battle royale: no hay gas tóxico, por lo que todo el mapa es seguro; aunque puedes, no necesitas recoger armas (puedes elegir tu armamento antes de entrar a la partida o modificarlo cuando quieras durante la misma) y hay respawn sin necesidad de ir al gulag ni de que un compañero tenga que traerte de vuelta. ¿Te han matado? Pues nada, vuelves a caer desde el cielo y venga, a seguir ganando pasta.

Warzone

Ya os podéis ir imaginando lo que puede dar de sí esto en un mapa tan enorme donde hay todo tipo de vehículos para desplazarse y crear todo el caso posible, desde coches o camiones hasta helicópteros. Hay mucho campero aquí, claro, porque al tener que extraer el dinero amasado llamando a los helicópteros que se encargan de ello desde las zonas habilitadas, una de las tácticas más trolls pasa por elegir un edificio cercano bien alto y abatir con el rifle de francotirador a quien ose acercarse a dichas zonas.

En todo caso, dadas las dimensiones del mapa y la cantidad de cosas por hacer y formas de enfocar cada partida, lo cierto es que la existencia de los camperos más trolls no llega a ser problemática. Basta con ir a otro sitio o, si buscas jaleo, dejarte caer cuando te maten encima de ellos y darles para el pelo.

Los dos modos que ofrece son divertidos y lo suficientemente distintos como para saltar de uno al otro cuando necesitemos tomar aire

En este modo, evidentemente, el dinero se gana muchísimo más rápido que en el battle royale. Eso significa que en las estaciones de suministros es mucho más fácil poder comprar de todo, tanto equipo como ventajas de rachas. Sólo puedes llevar una ventaja a la vez, pero la comodidad de comprar un UAV, usarlo y comprar otro, u optar por un ataque aéreo de precisión para desatar el caso sobre los pesaos que están en la azotea de aquel edificio tan alto, es maravillosa.

Quizás la principal pega de este modo es lo lejos que el sistema de respawn te deja del lugar donde has caído. Al parecer esto depende de dónde estén tus compañeros de equipo: si ambos estaban en la misma zona que tú al morir lo más probable es que puedas dejarte caer allí de nuevo, pero en el resto de ocasiones te puede soltar sobre cualquier sitio del mapa y suele ser en la otra punta…

La opinión de VidaExtra

Call of Duty: Warzone ha venido para quedarse. Los dos modos que ofrece son divertidos y lo suficientemente distintos como para saltar de uno al otro cuando necesitemos tomar aire.

El battle royale te mantiene en constante tensión, sobre todo en el modo Solos estrenado una semana después del lanzamiento del juego donde te enfrentas en solitario a otros 149 jugadores más, mientras que el modo botín es una divertidísima y loca válvula de escape con todo lo bueno de la saga Call of Duty sumado a unas mecánicas que dan para muy buenos ratos de diversión. Son partidas largas que además otorgan muchos puntos de experiencia, lo cual a su vez va de perlas si además tienes el Call of Duty: Modern Warfare porque todos los sistemas de progreso, armamento y equipo están conectados.

Quizás la principal pega que le pondría ahora mismo, y estoy seguro de que los desarrolladores la solucionarán más pronto que tarde, es el sonido. No en su conjunto, sino el sistema que nos debería permitir saber de dónde vienen los pasos del enemigo con mayor exactitud. A veces no queda muy claro si están más cerca, más lejos, en un piso superior o en uno inferior… No es desastroso, pero creo que le falta un punto de mejora ahí para acabar de ser redondo.

Por lo demás, juegazo. Y gratis.

Imprescindible

Call of Duty: Warzone

Call of Duty: Warzone

Plataformas PC, PS4, Xbox One
Multijugador Sí. Y con cross-play
Desarrollador Infinity Ward
Compañía Activision
Lanzamiento 10 de marzo de 2020
Precio Gratis

Lo mejor

  • Es gratis
  • El modo battle royale tiene novedades muy interesantes
  • El modo Botín es todo un hallazgo

Lo peor

  • El respawn en el modo botín
  • El sistema de sonido espacial no acaba de estar bien del todo

Comentarios cerrados
Inicio