Diez momentos espectacularmente brillantes de la saga 'Modern Warfare'

Diez momentos espectacularmente brillantes de la saga 'Modern Warfare'
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Hablábamos no hace mucho de que en Activision consideran a ‘Modern Warfare 3‘ como una película de Michael Bay. Personalmente, pienso lo que Tom Bissell, autor de ‘Extra Lives’, que comparar los videojuegos a otras formas de entretenimiento sólo funciona como recordatorio de los que, en realidad, los juegos no son.

Pero lo que está claro es que todos los Call Of Duty y, en especial, los ‘Modern Warfare’ se han convertido una fábrica de momentos salvajes, que dejan con la boca abierta, y que contribuyen al casi perfecto ritmo que han mostrado los tres títulos. ¿Cuáles son vuestros favoritos? Aquí os dejo mis diez momentos espectacularmente brillantes de la saga ‘Modern Warfare. Ah, claro, habrá spoilers, cómo hacer uno post así sin desvelar algo. Pero tranquilos, del MW3 sólo en las dos últimas posiciones.

‘Call of Duty 4’: Chernobyl on My Mind

En el primer ‘Modern Warfare’ teníamos que introducirnos en una ciudad rusa destruida por la radiación e interceptar a nuestro supuesto gran enemigo. Aquella fase en Pripyat quedará en la memoria de muchos por su espectacular desarrollo: no solo es que fuera una gran fase de sigilo, sino que momentos habituales en los COD o sus imitadores, como el de pasar reptando junto a una columna de militares rusos que peinan la zona, estaban cargados de la tensión perfecta.

La misma tensión, que también aprovechaba muy bien la oscura composición de la banda sonora, te tenía en vilo mientras apuntabas por tu mira de francotirador para luego liberarlo todo en esa huida desesperada. ‘Modern Warfare 3’ lo sabe y trae de vuelta aquel momento en un breve recuerdo, suficiente para saber

La muerte os sienta tan bien

Ponte en la piel de un hombre al que van a ejecutar. En la piel del tirano al que han conseguido capturar en plena Revolución. En cualquiera de ellos. En la del colaboracionista con Occidente al que guían, en un jeep, hasta su muerte.

Si empezar un juego así no es dar un manotazo en la mesa y llamar tu atención, ¿qué otra cosa puede ser?

Teléfono Rojo, volamos a por Al-Asad

La búsqueda de Al-Asad es acción pura con el final más infeliz posible. Hay en esta búsqueda desesperada de un tirano por las calles de la ciudad que domina muchos momentos para el recuerdo, como la entrada a los estudios de televisión o la travesía en jeeps por las estrechas callejuelas de la ciudad.

Pero nada supera a ese final explosivo, que va donde pocos se aventuran a llegar y que está narrado con bastante buen pulso, aunque Villalobos se explayará lo suyo al respecto de esta y otra bomba atómica de videojuegos en un próximo post.

Equipo a la parrilla

Quien tenga dudas de si Modern Warfare es una saga efectista, que se vuelva a ver la escena de la muerte en la hoguera. ¿Ver cómo acaba una traición desde los ojos del muerto (o casi muerto)? Los Modern Warfare están plagados de secuencias pasadísimas de rosca y hasta incoherentes en lo narrativo, pero pocas de manera tan clara como ésta.

Que más da: esto no es una película de Michael Bay; Michael Bay debería aprender de la saga ‘Modern Warfare’ a ser espectacular, vacuo y divertido a la vez.

‘Modern Warfare 2’: No Future for you (Russian)

‘No Russian’, no vamos a descubrir nada sobre ella. Es la fase más polémica de los tres ‘Modern Warfare’, con razón. ¿Entrar a un aeropuerto ruso a masacrar inocentes, porque sí? Tiene bastante de maniobra polémica para ganar notoriedad.

Y, sin embargo, la escena encaja en el juego, en cómo narra las cosas. Funciona como un reloj: aunque podríamos haber pasado sin ella, ¿sobra realmente? Bueno, personalmente pienso que no hay más que ver la escena de la familia de vacaciones en Londres del ‘Modern Warfare 3’ para saber por qué aún se puede ir igual de lejos… y resbalar y caer en lo simplemente vacío.

La fuga de las favelas

Dentro de esa desestructurada narración que es el guión de ‘Modern Warfare 2’, que nos va llevando de aquí para allá sin demasiada explicación (y, a veces, parece que sólo con la intención de conseguir escenarios epatantes para el multijugador) la misión en Brasil es una de las primeras.

Su punto culminante, la huida por los tejados de las favelas, es también una de las grandes persecuciones de la saga, donde nosotros somos la presa y más brasileños de los que podamos imaginar nuestros cazadores. Una vez conocido el recorrido, no hay demasiada pérdida, pero quedarse atrás o errar una puerta implicaba saber qué significa “¡Estás rodeado!”.

La guerra quirúrgica

En Infinity Ward se han convertido en maestros de hacer que en sus shooters siempre haya un toque especial. De ahí que el cuarto ‘Call of Duty’ tuviese un recibimiento especial respecto a otros FPS. Y, desde luego, fases como ‘Death from Above’ contribuyen a ello.

La guerra moderna, esa que títula la saga, es también así: la famosa guerra quirúrgica de los bombardeos a objetivos concretos a los que seguimos a través del satélite o mediante la máxima tecnología. Permitirnos controlar ese bombardero AC-130 fue una manera inteligente de dar un aspecto único y una fase que alguien tenía que atreverse a imaginar. A partir de ahí, casi todos en el género querrán encontrar maneras diferentes de romper la mecánica de juego mediante perspectivas únicas.

Entre dos cielos

¿Cómo repetir la sensación de la bomba nuclear y, a la vez, rehuir el simple revival, la copia de ti mismo o hasta lo autoparódico? Infinity Ward lo hicieron en ‘Second Sun’ con la explosión del EMP vista desde la Estación Espacial Internacional; con los momentos previos en el habitual helicoptero desde el que disparar al suelo; y con los momentos posteriores, en los que estamos absolutamente a oscuras.

Espectacular y brillante, sí, y junto a todo lo que ocurre en Washington, imprescindible.

‘Modern Warfare 3’: Volare

¿Qué se puede esperar de una misión que se llama ‘Turbulencia’ y que comienza en un avión? Obviamente, si estás en ‘Modern Warfare’, lo mínimos es saber que dentro del avión va a haber mnuchos problemas.

Pero, como vemos, en Infinity Ward no pueden conformarse con hacer sólo lo que se espera de ellos,sino que buscarán otras maneras de dejar con la boca abierta. Por eso, que sean capaces de sacarse de la manga ahí un par de momentos de “shooter sin gravedad” es tan gratuito como imaginativo y digno de mandíbula hasta el suelo.

Berlín para resumirlo todo

En general, todo ‘Modern Warfare 3’ está estupendamente pensado y rematado, también su campaña, corta pero nada de anticlimática. De hecho, casi se podría decir que todo el juego es un gran WTF! continuo: desde la Nueva York destruida que vemos por arriba y por abajo hasta los momentos finales (y nuestros virtualmente trajes indestructibles), pasando por ese aparcamiento subterráneo en el que no estamos dispuestos a pagar plaza.

Pero el rescate de Alena en Berlín quizás resuma todo lo que implica la saga: momentos de mucha acción directa, otros de disparos desde la larga distancia o desde el aire, la sensación de estar siempre a merced de unos guionistas pasados de rosca y capaces de cargarse a cualquiera y la de no dejar casi nunca un respiro. Berlín es una fase para disfrutar de todas las virtudes del modo campaña de los ‘Modern Warfare’.

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