En la industria de los videojuegos existen infinidad de sagas diferentes que en algunos casos se han acabado convirtiendo en históricas por la cantidad de juegos que forman parte de ellas o los buenos momentos que nos han hecho vivir. Por ejemplo, Nintendo puede presumir de contar con un buen puñado de franquicias en las que se aplica este ejemplo a la perfección.
Anteriormente hemos hablado de algunas de ellas, como por ejemplo F-Zero o Golden Sun, sin olvidar a personajes como Wario, que después de tantos años han desaparecido sin dejar ni rastro con sus propios títulos, pero si hay otra que, desgraciadamente, ha seguido el mismo ejemplo es Star Fox. De hecho, en este caso en concreto resulta más llamativo todavía, porque esta misma semana ha cumplido 30 años y la gran N no ha hecho nada para celebrar este acontecimiento.
Por todo ello hemos querido mirar al pasado de la serie y así preguntarnos, ¿qué fue de Star Fox?
El nacimiento de una de las mejores sagas de combates espaciales
Super Nintendo supuso el punto de partida para ciertas sagas que con el tiempo se han vuelto clave para Nintendo. Fue en 1993 cuando nació Star Fox, aunque en realidad aquí en Europa fue conocida originalmente con el nombre de Starwing. No obstante, uno de los principales motivos por el que se volvió tan especial fue por el hecho de que se trató del primer videojuego por apostar por unos gráficos en 3D.
Alcanzar ese apartado con la potencia de la consola de 16 bits de Nintendo resultó algo asombroso, algo que fue posible gracias al chip Super FX que se incluyó dentro del cartucho para que así la máquina fuese capaz de renderizar polígonos. Naturalmente no tiene nada que ver con lo que se llegó a ver más tarde en videojuegos más actualizados de Nintendo 64 o la primera PlayStation, pero para aquella época fue algo impactante.
Star Fox nos dejó con un shooter en el que pilotábamos el Arwing, una nave espacial para atravesar unos cuantos escenarios con el fin de acabar con Andross, un malvado científico que planeaba apoderarse del sistema Lylat. A lo largo de cada fase la nave se desplazaba automáticamente, pudiendo acelerar o frenar o realizar giros para esquivar los disparos de los enemigos o los obstáculos que fuesen apareciendo por el escenario.
En todos los niveles había multitud de enemigos y al final de estos aguardaba un jefe final para derrotar. Además, algo que caracterizaba a la aventura era el hecho de poder escoger distintas rutas, lo que afectaba a la dificultad, modificando las vidas disponibles, los enemigos y otros detalles. Aun así, algo que también ha hecho especial a la saga ha sido su elenco de personajes, formado por animales antropomórficos: el protagonista Fox, un zorro, y sus compañeros Peppy, Falco y Slippy, un conejo, un faisán y un sapo, respectivamente.
De hecho, los compañeros echaban una mano de vez en cuando, pero principalmente estaban para estorbar, porque de repente eran perseguidos por otro enemigo y era necesario salvarles el pellejo para que su nave no fuese destruida, en cuyo caso no volverían a aparecer el resto del juego. En cambio, el ayudarles servía para obtener más puntos al llegar al final de cada pantalla.
La propuesta dio tan buen resultado que unos años más tarde Nintendo decidió desarrollar Star Fox 64, conocido en Europa como Lylat Wars, para Nintendo 64. Para muchos está considerada como la mejor entrega de todas las que se han creado hasta la fecha, a pesar de que la jugabilidad era muy similar, pero el salto de calidad gráfica fue bestial, incluyendo novedades como un doblaje en los diálogos, nuevos vehículos para pilotar, villanos a los que enfrentarse y también un modo multijugador.
De nuevo se aplicaba el sistema de las diferentes rutas, con la diferencia de que aquí no había una preestablecida que dependía de la dificultad. En su lugar era posible escoger distintos caminos sobre la marcha, con que conllevaba tener que cumplir con objetivos determinados en medio de los niveles para desbloquear esas otras rutas alternativas. Por otro lado, su lanzamiento vino acompañado por el Rumble Pack, un dispositivo para hacer que el mando vibrase.
Es más, para que os hagáis una mejor idea, su aceptación fue tan buena que en 2011 se desarrolló Star Fox 64 3D, un remake para Nintendo 3DS, el cual mantenía los mismos puntos fuertes que hizo tan especial al juego original. Lo que sí se añadió como novedad fue un control que utilizaba el giroscopio de la consola junto con un nuevo modo multijugador en el que se podían juntar hasta cuatro personas simultáneamente mediante la conexión local.
El salto a otros sistemas con un gran cambio en sus propuestas
Antes del lanzamiento de este último título se publicaron otros tantos juegos de Star Fox en los que se aplicaron varios cambios en su jugabilidad con otras compañías a cargo de sus respectivos desarrollos. Por ejemplo, el tercero por fecha de lanzamiento fue Star Fox Adventures, para GameCube, y en este caso con Rare al frente se dejó principalmente de lado sus combates con naves espaciales para pasar a ofrecer una aventura de acción y plataformas en tercera persona en la que tomabas el control de Fox equipado con un bastón mágico.
Probablemente este fue el Star Fox más diferente de todos al parecerse más a un The Legend of Zelda en muchos aspectos. Eso sí, no fue el único que siguió este ejemplo, porque unos años después llegó Star Fox: Assault de la mano de Bandai Namco, el cual mezclaba fases con combates con naves espaciales y otras en las que Fox debía desplazarse a pie por los escenarios disparando sin ton ni son a todo lo que se moviese.
Después de ello en 2006 la saga probó suerte en las consolas portátiles con Star Fox Command, un título a cargo de Q-Games en el que la acción transcurría en su totalidad a los mandos de un Arwing. La diferencia es que aquí había que viajar por el mapa libremente buscando a los enemigos con toques de estrategia. Asimismo, las diferentes naves que se podían pilotar disponían de distintas características que afectaban directamente a los controles y a la forma de jugar.
Hasta que no pasaron diez años no se desarrolló un capítulo completamente nuevo y en este caso fue PlatinumGames la que tomó las riendas con Star Fox Zero, para Wii U, un juegazo que también se convirtió en uno de los mejores de la saga. Una vez más la jugabilidad optó por unos niveles enfocados en el control del Arwing, pero algo que tenía en especial es que las copias del juego incluían Star Fox Guard, un spin-off en forma de tower defense.
En principio este fue el último Star Fox que llegó a ver la luz, aunque un año después gracias a la Super Nintendo Mini se trajo a la vida Star Fox 2, el cual fue desarrollado originalmente para la consola de 16 bits, pero nunca llegó a ser finalizado del todo hasta ese momento. Por lo tanto, se aprovechó la excusa para completarlo y así permitirnos disfrutar de esta entrega en la que aparecían algunos elementos ya presentes en Star Fox 64, como la aparición del equipo Star Wolf o el modo libre a la hora de moverse por el escenario.
Una ocasión perdida por su 30 aniversario
No todos los días se cumplen 30 años y el pasado 21 de febrero transcurrieron tres décadas desde que Star Fox comenzó su andadura. Con un Nintendo Direct que ha tenido lugar este mismo mes se podría considerar que ha sido una ocasión perdida para que Nintendo no haya anunciado absolutamente nada relacionado con la franquicia, ya sea un nuevo juego, una remasterización, un recopilatorio o lo que sea.
Lo cierto es que es un caso similar al que ya expresamos con F-Zero relacionado con las ventas de Nintendo Switch, porque ya que la consola híbrida se ha convertido en una de las más exitosas de toda la historia con ventas millonarias en los títulos estrella de la gran N, ¿por qué entonces no desarrollar un nuevo Star Fox? ¿Tal vez por falta de ideas? ¿Ninguna compañía se ha animado a trabajar en ella?
Resulta curioso que en realidad la última vez que vimos al equipo liderado por Fox McCloud fue en Starlink: Battle for Atlas, un videojuego que ni siquiera estaba relacionado con la saga, aunque Ubisoft quiso crear unas misiones exclusivas protagonizadas por estos personajes en su versión para Nintendo Switch. Más allá de eso, solo se les ha visto en la serie Super Smash Bros. y poco más.
Entonces, si ni siquiera se le ha dado relevancia a la saga por su 30 aniversario, ¿volveremos a ver alguna novedad en el futuro? Porque seamos sinceros, un mensaje de felicitación en Twitter no es en absoluto suficiente. Al menos Takaya Imamura, el artista que diseño a Fox McCloud, entre otros, se lo curró algo más con unas ilustraciones especiales.
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