La mejor edición de Resident Evil 4 no es ni la clásica ni la nueva, es Resident Evil 4 Remake VR

La mejor edición de Resident Evil 4 no es ni la clásica ni la nueva, es Resident Evil 4 Remake VR

Disfrutar gratis de este modo en realidad virtual para el juego de zombis de Capcom es un regalo

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Resident Evil 4 Remake VR

Poco se puede decir ya de un juego que ha estado incluso nominado a los GOTY de 2023. Resident Evil 4 Remake es el ejemplo perfecto de que hay dos formas de hacer las cosas, o bien o mal, y a la hora de insuflar cariño a un desarrollo no hay hueco posible para una escala de grises.

En Resident Evil 4 Remake VR, tal y como ocurría en el juego base, esa pasión y gusto por la obra original nos deja no sólo uno de los juegos con mejores gráficos que hemos visto hasta la fecha en realidad virtual, sino también una propuesta que sabe alejarse de los errores típicos del medio para evitar todo lo posible mancillar el juego original.

El juego más impresionante de realidad virtual

Con una versión idéntica en escenarios, cinemáticas y reto, respecto a lo visto en el juego lanzado en marzo de 2023, la gran baza de esta versión para realidad virtual está principalmente en lo bien que luce tras las ópticas de un casco PlayStation VR2.

Tal y como ocurría en Resident Evil Village, incluso un punto por encima de lo visto allí, recorrer los escenarios de un portento como Resident Evil 4 Remake, con todo lujo de detalles y la posibilidad de recrearte, deteniéndote en cada una de las joyas de orfebrería que resultan ser desde el menaje de los aldeanos hasta la decoración de los castillos, lo cierto es que no se me ocurre una forma mejor de sentarte a apreciar lo espectacular que puede llegar a ser este juego.

Convertir la acción del juego en algo maleable en un mundo virtual supone juguetear con pistolas y objetos, sí, pero también darle alas a un frenetismo y tensión que por un momento te tiene disparando con la pistola a los zombis que te vienen por la derecha, y a la vez puedes coger la escopeta de la espalda con la mano izquierda para reventar al unísono a los que te vienen desde ese lado. Sus tiroteos pueden llegar a ser aquí mucho más divertidos que en el juego original.

No es sólo una cuestión de inmersión, que evidentemente suma bastantes puntos, sino la diferencia entre la presión que supone tener a un zombi a escasos centímetros de ti y tener que recargar a golpe de botón, frente a la que ofrece la misma situación en la que son tus manos las que deben dejar caer el cargador gastado, coger uno nuevo, introducirlo en la pistola, amartillarla para preparar la primera bala, y llegar justo a tiempo a efectuar el disparo para evitar un zarpazo que se queda a escasos segundos de darte el golpe de gracia.

En Resident Evil 4 Remake VR, menos es más

Sin embargo, todo esto, que también podría ser extrapolable a otros juegos de la saga con opción a disfrutarlos en realidad virtual, no es lo que más he celebrado de este Resident Evil 4 Remake VR. Ese logro va para todo lo que, por aquello de estar ante un juego que no se hizo con la realidad virtual en mente, decide abandonar todas las cucamonadas que suelen resultar en incómodas mecánicas que no aportan absolutamente nada, y que entran en el saco de las ideas puestas con calzador porque hay que marcar opciones en una casilla.

Las patadas voladoras, los saltos por las ventanas, los ataques con sigilo cuchillo en mano… Todas esas acciones se realizan a golpe de botón, en vez de recurrir a las cabriolas absurdas con las manos que comúnmente terminan derivando en problemas de control y, por ende, consiguen sacarte de la experiencia en vez de mejorarla.

Resident Evil 4 Remake VR

No necesito agacharme a recoger cosas, ni abrir puertas utilizando la maneta, ni arrastrar palancas, ni colocar piezas milimétricamente en el sitio correcto, y como no necesito que Resident Evil 4 Remake VR tenga esa sobredosis de chascarrillos en su vocabulario para ser una gran experiencia, ahorrármelos a golpe de botón para poder centrarme en lo que me interesa, en la exploración y en el combate, se convierte en el equilibrio perfecto entre ser un gran juego de realidad virtual y ser un gran videojuego.

Entiendo hasta qué punto para muchos esto puede ser un problema o un punto negativo, pero os aseguro que la idea, más por una cuestión de necesidad respecto al juego original que por benevolencia de Capcom, es tan acertada como cómoda y que, pese a la primera vez que ves la cámara saltar sobre el hombro de Leon para ver la acción en tercera persona puede resultar chocante, en realidad es algo a lo que tardas escasos minutos en acostumbrarte, y vas a estar horas agradeciendo.

Resident Evil 4 Remake VR

Con una buena cantidad de opciones para evitar mareos como la visión de túnel, y otro buen puñado de retoques a nivel de accesibilidad y dificultad para acciones como automatizar la recarga o colocar una mira láser con la que te resulte más fácil disparar, Resident Evil 4 Remake VR se asegura de no dejar a nadie atrás.

Una experiencia que se convierte en un regalo no sólo por el hecho de ser gratuita para quienes ya tengáis el juego base, sino también por todo lo que es capaz de ofrecer a quienes años después aún sigan buscando la experiencia definitiva de Resident Evil 4.

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