Ya es oficial: Activision Blizzard King pasa a formar parte de Microsoft. Una adquisición millonaria tras un proceso larguísimo y complicado que deriva en un valor añadido brutal para Xbox con efecto inmediato y, de cara a corto y medio plazo, para una suscripción a Game Pass que hoy ya es mucho mejor que ayer. Y mañana lo será todavía más.
La compra se ha completado tras un proceso que ha durado un año y diez meses, anunciándose con seis palabras: "I's a Good Day to Play". Es un buen día para jugar. Algo que queda recalcado en el tráiler en el que Xbox le da la bienvenida a un alucinante catálogo de juegos que va de Pitfall a Call of Duty, pasando por World of Warcraft, Candy Crush Saga y Crash Bandicoot. Además, claro, de todos los equipos que hay detrás de ellos.
¿Qué pasará a partir de ahora? Vayamos por partes: más allá de Xbox, PlayStation tiene garantizados 10 años de Call of Duty, y los juegos de Activision Blizzard comenzarán a publicarse en GeForce Now o Nintendo Switch. Por su parte, Ubisoft será la llave para llevar las sagas clave recién adquiridas a través de su servicio Ubisoft+. Buenas noticias para todos los jugadores reafirmadas por acuerdos previos a la adquisición.
Dicho lo cual, el plan de Phil Spencer, máximo responsable de Xbox, no es acaparar el legado de Activision Blizzard, sino expandirlo y, con él, la propia marca Xbox. Tanto en consolas como en PCs, y por supuesto la nube o unos dispositivos móviles que suponen la mitad de los ingresos de Call of Duty. Y eso, por otro lado, implica afianzar y revitalizar muchas licencias dormidas o llevarlas allí donde jamás habían estado.
Juntos, crearemos nuevos mundos e historias, llevaremos tus juegos favoritos a más lugares para que más jugadores puedan unirse, e interactuaremos y deleitaremos a los jugadores de maneras nuevas e innovadoras en los lugares que les encantan jugar, incluidos los dispositivos móviles y la nube. A través del streaming y más allá.
Ahora bien, los grandes ganadores son indiscutiblemente los suscriptores de Game Pass, el servicio de juegos de Xbox: de manera progresiva, los juegos de Activision y Blizzard irán llegando a su catálogo o recibiendo ventajas exclusivas en el caso de las propuestas gratuitas. Algunos lo harán antes y otros con el tiempo: a Diablo IV y al inminente nuevo Call of Duty todavía le quedan muchos meses. Algo parecido ocurrió con Bethesda y su escalonada llegada a Game Pass.
En cualquier caso, la imagen que se proyecta de cara al futuro de Xbox es impresionante: a los estudios ya en propiedad se le suman Blizzard, Treyarch, Infinity Ward, Sledgehammer Games, Raven Software o Toys for Bob. Y hablando de "Roberts", el siempre polémico Bobby Kotick permanecerá al frente de Activision Blizzard hasta finales de 2023.
Activision Blizzard y Microsoft acordaron cerrar el acuerdo antes del 18 de octubre. Que haya ocurrido en vísperas del periodo navideño (con su Black Friday) será un interesante espejo en el que ver los primeros resultados de esta inversión millonaria para Xbox. En cualquier caso, la división de videojuegos de Microsoft jamás había sido tan fuerte. Ahora le toca hacer juegos a la altura de las circunstancias.
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