Siguiendo el mensaje publicado por Sony de hace unas semanas en el que reconocían que no sabían a qué precio venderían PS5, Bloomberg ha publicado que la compañía está teniendo problemas con la escasez de componentes.
Al parecer, según fuentes cercanas a la producción de la consola, la actual demanda de memorias DRAM y NAND por parte del mercado móvil ha encarecido el coste de fabricación de PS5 hasta los 450 dólares.
Aunque es habitual ver a las compañías vender su nuevo hardware a precio de pérdidas, por debajo del coste de producción, no es lo que ocurrió con PS4 que, según estimaciones, entregaba alrededor de 20 dólares de beneficios a las arcas de Sony.
El factor precio en el éxito de PS5
Vender por debajo de su precio en márgenes pequeños no es un problema porque es común que la compañía espere recuperar esa pérdida en forma de juegos o servicios, pero colocarse a un precio muy superior a la competencia o las actuales consolas sí puede ser contraproducente.
PS3 sufrió ese mismo problema en sus inicios con un lanzamiento que rondaba entre los 500 y los 600 dólares, lo que unido a su retraso respecto al lanzamiento de Xbox 360 le dejó en una situación bastante más compleja de la que ha vivido con PS4. Además hay que tener en cuenta que el coste actual de PS4 Pro está sobre los 400 euros, 100 euros más de lo que cuesta Xbox One X.
Junto a los pormenores de PS5, Bloomberg también destaca que los exclusivos iniciales de la consola también podrán jugarse en PS4, una estrategia similar a la de Xbox Series X, y que Sony planea lanzar una nueva versión de PlayStation VR tras el aterrizaje de la nueva generación.
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