Los aficionados a los soulslike han podido disfrutar este año de juegazos de la talla de Elden Ring, uno de los mayores aspirantes a llevarse el GOTY. Para 2023 hay más títulos de este género en desarrollo y uno de los más esperados es Wo Long: Fallen Dynasty, el nuevo trabajo de Team Ninja con el que tratará de demostrar todo lo que ha aprendido en Nioh.
He de reconocer que nunca me he considerado un gran aficionado a los juegos tipo Dark Souls o similares, porque siempre acabo mordiendo el polvo rápidamente y acabo muriendo contra enemigos muy simples, así que de primeras ya me daba un cierto respecto ponerme a los mandos en esta versión de prueba a la que he podido asistir en un evento organizado por Plaion. No obstante, mis sensaciones han acabado siendo más positivas de lo que me imaginaba inicialmente.
Familiarizándome con los controles en un auténtico soulslike
La trama de este thriller sobrenatural nos presentará una versión oscura de la historia de Los Tres Reinos, en un momento en el que un soldado de la milicia se dedica a combatir contra letales criaturas y toda clase de monstruos. Desde luego es algo que queda claro desde el primer momento que nuestro protagonista es un guerrero sin nombre porque antes de pasar a la acción habrá que personalizarlo, modificar su aspecto, elegir la clase, etc.
Para esta versión las opciones estaban muy limitadas, pero da la impresión de que podremos cambiar hasta el más mínimo detalle para que cada uno juegue con el personaje que le apetezca. Aun así, lo realmente importante son las clases, entre las que hay cinco diferentes con sus propios estilos para que cada uno elija la que prefiera por su forma de jugar.
Por ejemplo, por la que yo me decanté se especializaba en el ataque directo con unos poderes basados en el fuego, aunque también había otra cuyas capacidades le permitían invocar pilares de tierra y enfocarse más a la defensa, otra que era más de apoyo con unas habilidades de curación, una que se dedicaba a causar efectos secundarios a los enemigos e incluso había una clase que lanzaba proyectiles de hielo y podía pasar desapercibida al moverse en sigilo.
En cualquier caso, todo esto afecta únicamente a las estadísticas iniciales son las que se comenzará el viaje, dado que los hechizos y las bestias que se pueden invocar se pueden modificar en cualquier momento durante la partida, por lo que a priori no me ha dado la sensación de que esta decisión fuese algo tan determinante o que influyese en gran medida a la hora de combatir contra los enemigos.
Al menos con los primeros lo único que me dediqué fue a atacarlos con una espada y con apenas unos golpes caían eliminados. Una buena forma para familiarizarte con los controles y para hacerte creer que igual no es tan complicado lo que te espera. Sin duda no podía estar más equivocado, porque el golpe de realidad no se hizo de esperar demasiado y ahí fue cuando comprobé personalmente que estaba frente a un soulslike que me iba a obligar a moverme con cabeza a la hora de atacar, bloquear los impactos y esquivar los de los enemigos.
Asimismo, en otro aspecto que se nota que bebe de este género es en el hecho de que por el camino encontraremos lugares para colocar una bandera, lo que vienen a ser las típicas fogatas para descansar, cambiar los hechizos por otros y también para subir de nivel distintos atributos dependiendo de las características que queramos potenciar. Eso sí, el acudir a estos lugares también implica que todos los enemigos derrotados volverán a aparecer en pantalla, así que tampoco conviene abusar de este sistema.
Muriendo y levantándome una y otra vez contra unas imponentes bestias
Como mencionaba antes, los primeros enemigos que eran soldados humanos eran una especie de monigotes preparados para recibir una soberana paliza, pero al avanzar un poco por esta versión de prueba comenzaron a surgir por todas partes criaturas y monstruos más temibles y que exigían de verdad darlo todo a los mandos, de ahí lo del golpe de realidad que indicaba previamente.
Sobre todo porque el primero que me encontré era una especie de Sonic hipervitaminado que se convertía en una bola de pinchos y realizaba una carga a toda velocidad, causando tanto daño que en apenas un par de golpes era capaz de matarte sin despeinarse. El morir afecta a la pérdida de puntos que se pueden canjear para mejorar al personaje, así como al nivel de moral, una de las funciones más importantes de la jugabilidad y que afecta directamente a la dificultad de la aventura.
En este sentido, el nivel de moral podría equivaler al nivel propio de cada personaje, ya sea el nuestro o el de los enemigos. Cuantos más eliminemos, más alto será el nuestro, lo que hará que nos volvamos más fuertes contra las amenazas que vayan apareciendo en pantalla al creernos más poderosos. Sin embargo, lo mismo sucede si son los enemigos los que acaban con nosotros, porque en ese caso nuestro nivel de moral disminuirá y el de ellos se incrementará, lo que puede ponernos en un serio aprieto si nos derrota una y otra vez la misma criatura.
Por suerte esto no sucede con los jefes finales, pero la especie de erizo que mencionaba fue sin duda el enemigo más duro con el que me topé en esta demo. Mira que probé diferentes estrategias y formas de afrontar el combate, pero hasta que no aprendí a dominar bien los ataques y hechizos y el sistema de bloqueo no conseguí hacerme con la victoria que lo celebré con una satisfacción tremenda, no lo voy a negar.
La cuestión es que no hay un bloqueo como tal, sino que es la propia esquiva la que realiza esta acción. No obstante, para ello se requiere unos reflejos excelentes para ejecutarla justo en el momento exacto en el que vas a recibir el golpe, lo que provoca en algunos casos que los enemigos se queden aturdidos y por supuesto hay que aprovechar la ocasión lo máximo posible para reducirles la barra de vida, porque podéis tener por seguro que no se andarán con chiquitas, sobre todo si hay varios juntos.
Lo de la esquiva sin duda fue esencial para derrotar al único jefe final con el que me topé, un jabalí descomunal que con él no servía de nada esquivar sin más. Había que dominar perfectamente el bloqueo porque era la única forma de derribarlo y así atacarlo a toda pastilla, pero vamos, que me costó su buena cantidad de intentos hasta que te aprendes bien los patrones, el momento exacto de atacar, etc., así que al final conseguí derrotarlo a base de ensayo y error, porque de primeras sin saber qué va a hacer era prácticamente imposible.
Además, hay otro sistema que también hay que tener presente en todo momento y es la barra de energía. En este caso la barra se situará en un punto medio que se comportará como una balanza, inclinándose a un lado u otro dependiendo de nuestras acciones, lo que a su vez tiene sus pros y sus contras. Por ejemplo, si nos dedicamos a utilizar magias o nos golpean, esta se llenará hacia la izquierda, pero si se llena demasiado nos quedaremos incapacitados durante unos segundos.
En cambio, para hacer que se llene hacia la derecha habrá que atacar bastante a los enemigos con ataques básicos, de manera que se podrá ejecutar un golpe devastador si esta llega al máximo. Así pues, es necesario encontrar el equilibrio entre unos ataques u otros dependiendo de la situación porque en ocasiones conviene más sacar partido de las magias y otras veces es mejor ir de frente a por las criaturas. En cualquier caso, todas estas funciones solo las pude ver muy por encima, pero al menos parecen muy interesantes para tratar de alejarse de cualquier otro soulslike.
He de decir que me sentí muy satisfecho al completar la versión de prueba porque en un principio pensaba que no lo iba a lograr. Lo mejor de todo es que las sensaciones que me ha dejado Wo Long: Fallen Dynasty han sido magníficas, con una gran jugabilidad, un rendimiento espléndido y ahora mismo tengo ganas de disfrutar de la versión final que saldrá el año que viene. Tal vez cuando llegue el momento de la verdad me arrepienta de mis palabras cuando me toque sufrir de lo lindo, pero es algo que tengo ganas de comprobarlo por mi propia cuenta.
Wo Long: Fallen Dynasty, RPG de acción, PEGI +18
- Plataformas: PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X/S, PC
- Multijugador: Sí
- Desarrollador: Team Ninja
- Compañía: Koei Tecmo
- Lanzamiento: 3 de marzo de 2023
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