El gran misterio de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom pasa por la premisa de redescubrir la Hyrule que nos enamoró en Breath of The Wild y volver a experimentar la emoción del descubrimiento y la genuina sensación de aventura. Nintendo es plenamente consciente de ello. Tanto, que por cada nuevo vistazo se resuelve una pequeña duda y se plantean otras tres. El más reciente avance no es la excepción. Quizás por eso nos gustó tanto.
En VidaExtra queremos equilibrar esa balanza. Precísamente por ello, nos hemos dedicado a repasar de manera exhaustiva cada pequeño y gran detalle del jugoso tráiler de Tears of the Kingdom y comparar lo mostrado en él con lo que ya sabemos en torno al universo de The Legend of Zelda, el mundo abierto que se abrió ante nosotros en Breath of the Wild y cada una de las novedades mostradas en lo jugable que, lejos de pasar desapercibidas, merecen ser celebradas.
¿Nuestro punto de partida? Un vistazo en propiedad al propio tráiler. Porque si lo vamos a analizar plano a plano, lo suyo es que sepamos qué se ha mostrado y de qué manera.
La primera conclusión a la que llegamos es que, pese a que sabíamos que el mundo abierto de Breath of the Wild se iba a expandir hacia los cielos, no vamos a tener tiempo para aburrirnos durante el tiempo que pasemos en tierra firme. Sobre todo, con todos los nuevos poderes, artefactos y juguetitos que Link, el héroe de la aventura, sumará en esta secuela con aspiraciones de obra maestra.
La segunda, no tan a la vista, es que pese a todas las novedades mostradas, el punto de partida de esta nueva gesta del Héroe transcurre en ese mismo Reino de Hyrule rebosante de misterio y aventura. Con nuevos peligros y, según hemos podido ver, algunos cambios inesperados.
Bienvenidos al Reino de Hyrule 2.0
El significado de "Tears of the Kingdom" es algo que iremos averiguando a lo largo de la partida, pero la manera en la que arranca el vídeo parece darnos una pista: un cielo colmado de gotas de lluvia. O, al menos, lo que se deja ver del mismo. Los compases iniciales son intencionadamente oscuros. Y, sin embargo, hay mucho que ver.
Vemos una tormenta con rayos verdosos, muy diferentes en forma y diseño a los de Breath of the Wild, sobre un amplio campo en el que apenas se consigue distinguir nada.
De hecho, si editamos la imagen un poco y eliminamos el efecto niebla no tardaremos en ubicarnos: al fondo es posible ver la Montaña de la Muerte. Tirando del mapa de Hyrule es fácil establecer que lo que se muestra es la Pradera de Mabe, en la que se pueden ver bancos de niebla repartidos por el horizonte, pero si nos fijamos lo suficiente no tardaremos en detectar unas llamativas espirales verdosas a ras de suelo y restos de lo que parece ser la misma Malicia que contaminaba Breath of the Wild.
La primera novedad certera la encontramos tras cambiar el escenario al Campo de adiestramiento, el cual se encuentra al sudeste del Lago Makore. En este primer vistazo nos topamos de frente con el primer nuevo tipo de enemigo que, en esencia, es una criatura voladora a medio camino entre un lagarto y un murciélago.
Entrando ya en el terreno de la especulación, podría tratarse de un nuevo rediseño de los Dacto, un enemigo con aparecía de pterodáctilo al que ya nos enfrentamos en juegos como A Link to the Past y A Link Between Worlds. Otra alternativa nada descartable es que se trate del Aquamentus de The Legend of Zelda Oracle of Seasons.
En cualquiera de los dos casos, por cierto, esta nueva bestia alada forma parte de la fauna local en una versión alternativa del Reino de Hyrule. Lo cual justificaría su ausencia en Breath of The Wild. Con todo, puede tratarse de una especie completamente nueva.
Dicho lo cual, hay muchos más enemigos alados en los anteriores juegos de Zelda y es lógico pensar que puede tratarse de uno completamente nuevo, pero su propósito es más que evidente: ofrecer al jugador una bestia que suponga un desafío para el jugador en una aventura diseñada para que pase menos tiempo con los pies en la tierra.
Mucho más interesante quo anterior es el siguiente plano (lamentamos la pixelización tras editar) en la que se nos muestra que las Torres de la región de Tabanta se encuentran iluminadas de manera muy misteriosa mientras que parece originarse un enorme tornado en los cielos. ¿Tendrá algo que ver Vah Medoh, la bestia divina del viento?
Tras una vista aérea, lo siguiente que vemos son los primeros enemigos de Breath of The Wild con algunos cambios no tan sutiles en lo que se refiere a su diseño.
Si bien, todavía es temprano para saber qué están haciendo, está más que claro que están revestidos en Malicia. Y no es lo único que ha cambiado en ellos: sus armaduras, armas y ornamentos son mucho más salvajes. Por su parte, si miramos a la derecha notamos una especie de pequeñas luces que, en cierto modo, nos recuerdan a las almas de Twilight Princess. Más concretamente, las del Reino del Crepúsculo.
En el caso de los Bokoblin veremos novedades: a los de la entrega anterior se les aprecia que su pequeña cornamenta ha crecido drásticamente. Otros, según se muestra en el arte oficial, se llaman Jefes Bokoblin y son bastante distinguibles: además de llevar un hacha en la cabeza tienen el tamaño de los Hinox.
Sin embargo, uno de los nuevos enemigos más interesantes no se nos es presentado del todo: en el siguiente plano nos ofrece una nueva vista del puente sobre el lago de Hylia en el que destaca una figura draconiana.
Ésta se ilumina en lo que parecen ser las tres crestas de tres cabezas, lo cual nos invita a pensar que en esta entrega nos enfrentaremos a un viejo enemigo como puede ser el Trinexx de A Link to the Past, el Gleeok del Zelda original de NES. Sospechamos que no tardaremos demasiado en ponerle nombre definitivo.
Lo siguiente que vemos es un nuevo vistazo aéreo de la Aldea Hatelia, una de las pocas que sobrevivieron al cataclismo. De hecho, mucho de lo que había en Breath of the Wild ha desaparecido, incluyendo el santuario.
Y si bien la iluminación no acompaña demasiado, el plano vuelve a hacer sobresalir otra de esas espirales que emergen desde la propia tierra y esas pequeñas lucecitas azuladas. Definitivamente, la cosa no pinta nada bien para el jugador. ¿Dónde está el héroe?
Link entra en escena y se luce con nuevos artefactos
¡Casi cuarenta segundos ha tardado en asomar Link en el tráiler! Y eso no es poco. Eso sí, su presentación, incluso de espaldas, ya nos da algunas pistas de lo que veremos: el escudo ya lo vimos en el tráiler anterior, pero ya comienza a asomar su nueva vestimenta y uno de los mayores cambios de Tears of the Kingdom: su nuevo brazo derecho.
Por cierto, entendemos por qué no ha salido de casa esta noche: brilla la luna carmesí, la cual aumenta el poder de la Malicia, y eso vuelve a los monstruos de Hyrule más revoltosos de la cuenta.
A partir de aquí volvemos a ver un evento mostrado en vídeos anteriores: el Castillo de Hyrule es sometido a la Malicia y de derrumba entre explosiones y bajo el embrujo de la luna carmesí hasta elevarse sobre los cielos.
Como detalle adicional, en esta misma secuencia se nos muestra lo que parece ser una explosión y posterior lluvia de Malicia que cae directamente sobre uno de los bordes de la Meseta de los Albores, la zona en la que comenzamos Breath of The Wild y en cierto modo nos sirve de tutorial. Lo significativo es que, en esta ocasión, se encuentra completamente despejada de nieve.
Teniendo en cuenta que técnicamente no ha pasado demasiado tiempo entre los acontecimientos de ambas entregas, se trata de un dato muy a tener en cuenta.
La lluvia de malicia está acompañada del primer vistazo e propiedad a los nuevos diseños de los enemigos.
A los Bokoblins los tenemos muy vistos, pese a su renovado aspecto. Pero ahora tenemos claro que lo que llueve es Malicia.
Mucho más interesante es la aparición y el debut en esta Hyrule de otros viejos conocidos de la saga: los ReDead, a la derecha, que aparecieron por primera vez en The Legend of Zelda: Ocarina of Time. regresan. Como detalle, estos suelen aparecer en cementerios y templos. ¿Qué es realmente la Meseta de los Albores?
La siguiente imagen, por cierto, también robará una sonrisa a los fans de The Legend of Zelda: Ocarina of Time, ya que Link aparece galopando a lomos de un caballo que es prácticamente igual a Epona. Como elemento a tener en cuenta, ésta solo aparecía al escanear un Amiibo en Breath of the Wild.
El plano, por cierto, nos deja con otro vistazo del tornado que se está generando en el cielo y a nivel artístico parece contrastar totalmente -no sabemos si de menare intencionada- con el arte de la versión para 3DS de Ocarina of Time.
Por desgracia para Link, su épica entrada en escena se verá rápidamente interrumpida: al pisar un extraño mecanismo en el interior de una habitación no tardará en caer presa de unos brazos con garras afiladas que en cierto modo recuerdan a los Guardianes de Breath of the Wild.
Aquí hay muchos elementos a destacar incluyendo las runas y varios símbolos del clan Sheika y que el mecanismo es muy similar al transportador que se encuentra únicamente en las Bestias Divinas de Breath of The Wild. Por otro lado, el primer brazo no acaba en una garra, sino en un artefacto diferente.
Un detalle también muy revelador es que, además, se pueden apreciar varios detalles en la indumentaria de Link: además de su brazo derecho vemos su capa y una extraña funda en su costado izquierdo.
La funda del costado es un misterio en sí mismo. Podría tratarse de la fuente de poder de las nuevas habilidades de Link o parte de una nueva herramienta. En cualquier caso, y como veremos más abajo, parece que ha sustituido completamente a la piedra Sheikah.
Los problemas no suelen llegar solos y lo siguiente que vemos son nuevas variedades de Bokoblin cuya ornamenta pasa a consistir en un único cuerno de doble punta. Eso sí, convenientemente cegados por la barbarie bajo los efectos de la luna. Eso sí, comandados por un Jefe Bokoblin que se sirve de un cuerno (se aprecia mejor en la ilustración oficial que pusimos al principio) para darles instrucciones.
Conociendo a los creadores de Breath of The Wild, estamos casi seguros de que Link tendrá una manera de sacar partido a ese cuerno en el juego.
¿Son parte de un recuerdo o suceden tras los acontecimientos de Breath of The Wild? Bueno, en el anterior tráiler se mostró un mural en piedra en el que ocurre un evento muy parecido.
Otros enemigos que regresan son los referidos Hinox, unos gigantes de un solo ojo que parecen haber recibido un cambio de vestuario muy curioso.
¿Qué pasará si lanzamos una flecha a esa burbuja verde que llevan al cuello? O un martillazo a ese sombrero de madera? Si yo fuese Link, correría en dirección a él para averiguarlo. Aunque en esta entrega hay muchas cosas más que hacer que intercambiar golpes.
Llegó la hora de surcar los cielos de Hyrule
En un juego en el que descubriremos los cielos del reino de Hyrule, la paravela tendrá un valor todavía más especial, si cabe. La primera vez que aparece en el tráiler es en el minuto de metraje y nos muestra a un Link lanzándose sin miedo desde el Monte Roham. Dejándonos ver por fin el cielo claro y, con él, varias de las nuevas estructuras flotantes que podremos descubrir en Tears of the Kingdom.
A partir de aquí, el tráiler nos hace un aviso: Link no será el único que vuele en el juego: los propios Bokoblins cooperarán con las bestias aladas para continuar las batallas de las que intentemos escapar en el aire o allá donde nos elevemos.
Uno de los aspectos más llamativos de Tears of the Kingdom es que parece que los enemigos podrán comunicarse e interactuar entre sí de nuevas maneras. Además de lo mostrado con el Jefe Bokoblin y su cuerno o las bestias aladas, hemos visto como las bestias de esta nueva Hyrule han aprendido a cooperar y organizarse. ¿De una manera desafiante? Estamos deseando averiguarlo.
Sobre todo, de cara a las nuevas clases de enemigos: si bien, todavía no hemos visto Guardianes activos en Tears of The Kingdom, se nos han mostrado nuevas variedades de los ya conocidos, nuevas especies y una amenaza compuesta por cubos que no sabemos si catalogar como máquina o ser vivo, pero que puede aplastarnos al menor descuido. Eso sí, por lo mostrado parece que solo habita en las nuevas zonas elevadas.
Dicho lo cual, la que promete ser la mayor amenaza de Tears of The Kingdom es la siguiente en asomar: la silueta que recuerda a una momia resucitada emerge entre extraños símbolos, mostrando la enorme carga de Malicia que brota desde su pecho.
La silueta emerge tras aparecer despertando de manera gradual en cada uno de los tráilers anteriores y por fin se mantiene en pie, mostrando su figura al completo y la magia de su melena. Es más, parece estar realizando un siniestro ritual. ¿El mismo que originó la luna escarlata?
Y pese a que es relativamente temprano para sacar conclusiones definitivas, que no tenga las orejas puntiagudas de los hylianos sumado a sus extrañas joyas nos invitan a pensar que se trata del mismísimo Ganondorf, siguiendo su rediseño desde Ocarina of Time hasta las entregas más actuales. Pero, claro, esto es pura especulación.
Cómo redescubrir Hyrule y la propia sensación de aventura
Puestos en contexto, y apreciando todo lo que hay en juego, llega la parte más interesante del tráiler de Zelda: Tears of The Kingdom en la que se nos muestra todo lo que podremos hacer en esta entrega. Empezando, claro, por una enorme vista desde las alturas que busca dar la réplica a la clásica estampa de Link frente a la inagotable Hyrule de Breath of the Wild.
Una vez más, se aprecia el detalle del vestuario de Link con todas las diferencias y cambios frente al que pudimos ver en su aventura anterior y un miedo igual o inferior a cero a la hora de saltar desde las alturas. Algo que sus antepasados han superado desde los tiempos de Skyward Sword.
El siguiente plano es un recordatorio de que todo lo que nos gustó en Breath of The Wild estará más o menos en su sitio. Con cambios, desde luego, pero cuando no estemos en los cielos podremos disfrutar perdiéndonos por las praderas, lagos, valles y montañas encontrando toda clase de lugares de interés.
Eso sí, en el proceso ha desarrollado nuevas armas: una de las primeras nuevas armas que vemos es una especie de flecha con punta en forma de globo que corrige su rumbo y rastrea a las nuevas criaturas aladas. Algo que, no lo vamos a negar, nos va a venir de perlas. Por cierto, al dispararse el nuevo brazo de Link se ilumina.
Y, si bien, ya podíamos surfear sobre nuestros escudos en Breath of the Wild, en Tears of the Kingdom podremos emular directamente a Tony Hawk aprovechando los raíles de las zonas montañosas como la Montaña de la Muerte. Es más habilidad que tecnología, o quizás se hace uso de algún tipo de magnetismo, pero estamos seguros de que esta habilidad será determinante a la hora de viajar entre las nubes.
¿Y qué pasa con la piedra Sheikah? La "tablet" multiusos de Breath of the Wild brilla por su ausencia hasta ahora, aunque no está técnicamente ausente: Zelda la lleva o tiene un nuevo modelo, según hemos podido ver en los tráilers y el arte oficial. Por suerte, Link no estará indefenso ante la adversidad.
De partida porque tendremos a nuestra disposición un nuevo repertorio de armas y herramientas, incluyendo los guanteletes que hemos podido ver en anteriores avances y una nueva maza con la propiedad de proyectar unas misteriosas esferas al rebotar en el suelo.
Pero lo mejor es que, tal y como se ha mostrado en varias ocasiones, Link podrá realizar nuevos tipos de acciones directamente usando su brazo derecho, algo esencial a la hora de resolver puzles o accionar mecanismos complejos.
Y este nuevo poder no solo sirve para resolver mazmorras: también le ayudará a llegar a lugares inaccesibles o interactuar de nuevas maneras con las ruinas y mecanismos de Hyrule.
Lo cual nos lleva a la pregunta de rigor: ¿Qué le ha pasado a Link en el brazo?
El misterio tras el brazo derecho de Link
El cambio más importante de Link no serán sus nuevos atuendos o esas armas tan pintorescas, sino su brazo derecho. Su piel se ha vuelto oscura, sus uñas se han alargado y parece envuelto entre diferentes adornos. Eso no es muy normal.
Si bien, contamos con que el propio brazo de Link es uno de los enigmas que Nintendo se está reservando por ahora, podemos llegar a algunas conclusiones según lo visto si reorganizamos lo acontecimientos del último tramo del avance.
- Sabemos, por los primeros tráilers, que el brazo entero de Link ha sido corrompido por la malicia.
- Ahora también sabemos que esa corrupción le cubre todo el brazo hasta la altura del hombro y parte del pecho.
- Sabemos que en ese mismo momento se separó de la princesa Zelda
- También sabemos, que tras ser expuesto a la corrupción, fue tratado por lo que parece ser una hyliana. ¿L
También sabemos cómo comenzó el proceso, ya que la Malicia brotó directamente del pecho del nuevo ser emergido. Un tipo de malicia tan potente que, como podemos ver en el tráiler, ha corrompido a la propia Espada Maestra.
Y es que, a juzgar por el arte oficial del juego, es normal que no hayamos visto muchas escenas de tajos y espadazos de Link hasta ahora: la hoja que durante generaciones ha protegido el destino de Hyrule está destrozada.
Y, si bien, Link no parece tener los conocimientos básicos para repararla, no estará falto de recursos: de partida, porque puede canalizar un nuevo tipo de poder a través de su brazo derecho.
Pero, además, porque tendrá su propia línea de vehículos accionados con esa extraña energía, incluyendo:
- Una carreta motorizada con sus propios faros y todo (perfecta para conducir de noche)
- Un globo aerostático con suficiente espacio para llevar a los cuatro Campeones. Si siguen de una pieza.
- Por último, pero no menos interesante, un hovercraft que con las corrientes propicias y la energía necesaria es capaz de elevarse hasta más allá de las nubes.
El proceso para encontrar o construir estas máquinas justificará que nos perdamos y demos rodeos de cara a llegar al final de la historia. Los experimentos que los fans podrán hacer al combinar sus usos con las habilidades del brazo de Link será aquello que nos tendrá obsesionado durante los próximos siete años.
Tears of The Kingdom sigue siendo un misterio, pero las nuevas pistas son una pasada
Tal y como prometimos, hemos exprimido hasta el último fotograma de lo mostrado en The Legend of Zelda: Tears of The Kingdom. Tal y como sospechamos, nos quedan más dudas que resolver que conclusiones firmes. Pero eso no es malo, sino todo lo contrario: el enigma detrás de esta nueva aventura del Héroe de Hyrule se está diseñando para volver a enamorar a los más de cien millones de usuarios de Nintendo Switch.
Siendo considerado, a todos los efectos, uno de los juegos más esperados de la década. Para muchos, el que más.
El mundo abierto expandido de The Legend of Zelda: Tears of The Kingdom abrirá sus puertas a partir del próximo 12 de mayo en exclusiva para Nintendo Switch. Contamos con que volveremos a saber del mismo antes de esa fecha. Y, sin embargo, con todos los cabos sueltos que nos deja Nintendo (de manera intencionada) lo mostrado ha puesto nuestras expectativas por las nubes. Básicamente, como el propio Link.
