Ya había aparecido Valheim por las tierras de Xbox Game Pass en PC, pero ahora el título de Iron Gate ha dado el salto definitivo a consolas Xbox One y Xbox Series X/S. La obra multijugador nos permite recorrer un enorme mundo abierto tanto en solitario como en compañía de nueve jugadores más, todo ello inspirado en la siempre atrayente mitología nórdica.
Aún todavía en acceso anticipado te puedes encontrar una cantidad de contenido descomunal. Aquí encarnamos a un guerrero muerto que ha sido llevado por las Valquirias al décimo reino nórdico, el cual está plagado de monstruos y criaturas que tienen como objetivo acabar con los dioses. El rey de todos ellos es Odín y tu deber es aniquilarlos a todos para demostrar tu valía como defensor de las divinidades.
Las posibilidades de Valheim son casi infinitas, pudiendo construir enormes casas vikingas, bases fortificadas y edificios inexpugnables. En manos habilidosas, hemos podido ver edificaciones colosales como el campo de Quidditch de Harry Potter, aunque hay que estar atentos a la recolección de recursos. Cultivar hortalizas, preparar comida, elaborar herramientas, embarcaciones, pociones y una variedad enorme de objetos son el pan de cada día.
Eso sí, cada partida es distinta, pues el décimo mundo se genera de forma procedural para que nos topemos biomas únicos. El sistema de combate se basa en la resistencia y premia tanto la habilidad como la preparación antes de lanzarnos a la batalla. Por supuesto, los jefes son durísimos, teniendo que enfrentarnos a seres del calibre de Eikthyr, The Elder, Bonemass, Moder o Yaglyth.
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