“Sorprendente, sin precedentes e irracional” Por qué Sony expresa su rechazo al nuevo avance en la compra de Activision Blizzard

“Sorprendente, sin precedentes e irracional” Por qué Sony expresa su rechazo al nuevo avance en la compra de Activision Blizzard

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Xbox Vs Playstation

Sony no quiere que Activision Blizzard se sume a los estudios de Xbox. Eso nos ha quedado claro desde el propio anuncio de Microsoft, hace más de un año. El golpe para PlayStation puede ser enorme y cada vez más son los países que, a través de sus organismos reguladores, no encuentran motivos para impedirlo.

Recientemente, el Reino Unido, quienes cuestionaron el movimiento de Microsoft en alguna ocasión, puso sus conclusiones provisionales al respecto de la adquisición de los creadores de Call of Duty, Crash Bandicoot o Warcraft sobre la mesa y tampoco son del agrado de Sony. Es más, a través de sus propias observaciones deja patente que las encuentra irracionales.

La reversión de la posición de la CMA (Autoridad de los Mercados y la Competencia) sobre la teoría del daño de sus consolas es sorprendente, sin precedentes e irracional.

Sony no ha manifestado su interés en hacerse con Activision Blizzard. De hecho, no está compitiendo con Microsoft por ella. Busca que la CMA replantee su postura y que, pese a las conclusiones provisionales, se tengan en cuenta otros parámetros y nuevas consideraciones.

Entre otras cosas, porque la propuesta de Sony por no incluir a Call of Duty en la compra no tiene demasiado sentido ni para Microsoft, ni para Activision Blizzard.

El argumento de Sony, según sus propias observaciones

Originalmente, la CMA del Reino Unido había encontrado impedimentos para la adquisición de Activision Blizzard. Phil Spencer, de Xbox, responsabilizó de manera directa a PlayStation en torno a estas conclusiones. Ahora, conforme ha avanzado el caso, las nuevas conclusiones provisionales son favorables a Microsoft y Sony ha decidido puntualizar cada uno de los puntos que considera sustanciales para replantear la postura de los organismos reguladores.

  • A través del documento, Sony cuestiona que Microsoft acabe teniendo la capacidad de excluir si no total, al menos parcialmente a PlayStation de sus proyectos. O directamente no darle una prioridad a los juegos en consolas PlayStation.
  • Además, ha dejado claro que tras la adquisición de Bethesda, Microsoft ha anunciado juegos exclusivos para su plataforma de juegos. Dejando claro que casos como Minecraft son la excepción y no la regla.
  • También contradice muchos de los aspectos y argumentos, como puntos de anexos en los que se especula que ningún usuario con menos de 10 horas de juego o tras haber gastado 100 dólares en Call of Duty cambiaría de consola.

En términos generales, lo que Sony expresa es que, basándose en el historial anterior de Microsoft, si se completa la adquisición las consolas PlayStation dejarán de ser una prioridad para Activision Blizzard y esto puede llegar a afectar de manera muy directa a la base de jugadores de juegos como Call of Duty.

Lo que propone, por otro lado, es que la CMA replantee su postura en base a revisar los análisis en las conclusiones provisionales y tras corregir los errores que ellos mismos han identificado. O, dicho de otro modo, que no se dé el visto bueno a una compra en la que, por cierto, no participa aunque sí le afecta.

Por qué Sony rechaza una compra en la que no participa


Entonces, ¿depende tanto PlayStation de Activision Blizzard? Bueno, sus juegos son uno de los mayores activos de PlayStation, pero no podemos obviar que la estrategia de Sony con los grandes bombazos de Square Enix refleja de muchas maneras aquellos posibles escenarios que aparecerían tras la adquisición y con lo que no está de acuerdo.

¿Qué ganaría Sony con esto? Sabemos que Call of Duty influye de manera directa en la venta de consolas. Sony lo sabe de primera mano. Y, sin embargo, según llegó a indicar Lulu Cheng Meservey, ejecutiva de Activision Blizzard, el propio presidente de PlayStation declaró en febrero que ni siquiera estaban interesados en un nuevo acuerdo en torno a Call of Duty, sino en bloquear la compra.

El argumento: Sony no quiere que la compra de Activision Blizzard derive en nuevas exclusividades para Microsoft, ya sea en juegos o en contenidos. Incluso llegó a declarar que no se aprovecharían las funcionalidades de PS5 y hasta se insinuó que en el futuro los juegos de Activision para PlayStation podrían incluir bugs. 

Mientras tanto, Xbox no ha parado de sumar alianzas con Nintendo, NVIDIA y otros socios para llevar sus sagas, incluyendo Call of Duty, a nuevas plataformas.

Se espera que a finales de abril se haya completado la investigación por parte de los organismos reguladores del Reino Unido. ¿Significa que los jugadores de PlayStation se quedará sin Call of Duty? En Xbox tienen la intención de seguir publicando los juegos de Activision Blizzard en todas las consolas, incluidas las de Sony.

Lo más interesante es que Phil Spencer y Microsoft les ofrecieron un trato en las condiciones que ellos estimasen para seguir publicándolo durante 10 años en PlayStation. Solo es necesaria la firma de Sony o que pidan nuevas condiciones. Salvo una, claro: que Xbox venda la franquicia Call of Duty antes de cerrar la compra.

Activision Blizzard se ve confiada en que la CMA británica apruebe su adhesión a Xbox

En declaraciones a The Verge, el portavoz de Activision Blizzard, Joe Christinat se muestra muy positivo en torno a este nuevo movimiento por parte de la Autoridad del Reino Unido.

Porque no está de más recordar que, si bien, Sony se opone de manera pública a la compra, la propia Activision Blizzard luchará para defender la adquisición de Microsoft si es necesario.

Apreciamos la inversión de CMA en una industria que ayudaron a ser pionera y que seguirá siendo vital para el crecimiento en el Reino Unido
Esa previsión y comprensión de nuestra industria es la razón por la cual el Reino Unido ha sido una fuente líder de innovación en los videojuegos; confiamos en que seguirá siéndolo en el futuro.
Las conclusiones provisionales actualizados de la CMA muestran su comprensión más profunda de los videojuegos de consola y demuestran un compromiso de apoyar a los jugadores y la competencia.

El culebrón en torno a la adquisición de Activision Blizzard se ha alargado mucho más de lo que todos esperábamos. Microsoft ha puesto 68.700 millones de dólares sobre la mesa y un plan para llevar las sagas a nuevas plataformas. Sony, por su parte, no parece dispuesta a que la compra se formalice y se está preocupando de dejar constancia de ello.

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