Cuando una bomba de semejante calibre toca tierra y produce su explosión, acaba produciendo cambios que se sentirán por el resto de los tiempos. Que Microsoft haya decidido sacar a pasear su capacidad económica comprando Activision Blizzard hace que las dudas surjan alrededor del acuerdo.
Y es que el abanico de posibilidades sobre el futuro es amplio y con tantas franquicias que llegan a la división dirigida por Phil Spencer cabe hacerse una pregunta: ¿revivirán alguna saga olvidada?. Lejos de esquivar la cuestión, los dos máximos responsables de sellar la compra se han pronunciado y postulado candidatos.
Bobby Kotick ha adelantado que le encantaría volver a tocar riffs con la guitarra de Guitar Hero, además de darle una nueva oportunidad a las figuras de Skylanders. Por su parte, Spencer ha sido muy entusiasta con traer de nuevo a la vida franquicias como King's Quest, Hexen y una vez más, Guitar Hero. Es por ello que toca hacer repaso a algunas de las franquicias que más nos gustaría volver a ver en nuestras pantallas.
Guitar Hero
Lo piden ellos, lo pedimos nosotros y es un clamor popular del que no se puede huir. Quizás los más jóvenes no lo recuerden, pero a mediados de los años 2000 una inmensa cantidad de instrumentos de plástico invadieron millones de hogares. Entre Harmonix, Neversoft y Vicarious Visions, principalmente, revolucionaron a multitud de jugadores pudiendo realizar conciertos en sus casas.
Las guitarras con teclas de colores eran el pique perfecto para la reunión entre amigos y demostrar quién podría subirse a un escenario. Fueron hasta 15 juegos basados en Guitar Hero los que llegaron a ver la luz, con el último siendo Guitar Hero Live en 2015. Un retorno ilusionaría a muchos y que podría verse impulsado por acuerdos con bandas, como ya sucedió con Aerosmith o Metallica.
Y ya que estamos, se le podría dar otra oportunidad a DJ Hero, el spin-off que nos colocó un mesa de mezclas para pinchar en mitad de la discoteca. Todos esos periféricos ahora están en algún lugar de nuestro sótano y hay que rescatarlos como sea.
Blur
Pisar el acelerador en el mundo virtual nos pone a 100, pero Activision se empeña en que solo podamos hacerlo con Crash. Para los que desean velocidades de vértigo y entornos realistas, Blur sería un caramelo irrechazable. La única entrega que tuvimos en nuestras manos tenía potencial para brillar.
Bien recibida por la prensa, los números en ventas no respaldaron una secuela de un título en el que los potenciadores repartidos por los circuitos añadían ese punto extra de arcade. El destino de Bizarre Creations no fue mucho mejor que el de Blur, ya que apenas un año después del lanzamiento terminó siendo cerrada por Activision. Eso sí, nadie nos quita de echarle un vistazo a lo que hubiese sido una segunda parte.
Prototype
Corría el año 2009 y lo único que importaba en aquella época era decidirse entre comprar inFamous o Prototype. Dos juegos sorprendentemente parecidos en sus planteamientos, con personajes atiborrados de poderes, parkour y un mundo abierto. Bueno, llamar parkour a lo que hacía Alex Mercer es ser demasiado ingenuo.
Radical Entertainment se sacó de la manga un título en el que podías arrasar con todo aquello que se te pusiese delante, gracias a las capacidades sobrehumanas de su protagonista. El éxito se confirmó con una segunda parte que ponía como villano a Mercer, pero el estudio fue diluido a lo largo de las divisiones de Activision para dar apoyo a otros proyectos. ¿Campar a nuestras anchas por una enorme ciudad sin ley ni orden? Sírvame otro, por favor.
Pitfall!
Para bien o para mal, Activision lleva en esto de la industria desde mucho antes de que mucho hubiésemos nacido, servidor incluido. Allá por el lejano año 1982, la compañía lanzó de la mano de David Crane lo que podría haber sido un juego más para la Atari 2600.
Pitfall! se ha convertido en un referente absoluto de cómo se debían y deben realizar los plataformas de scroll lateral. 255 pantallas en las que atravesar peligros y trampas de todo tipo que podrían revivir con una puesta a punto como Dios manda. Proyectos más locos se han visto y aportarle todo un contexto, narrativa y mecánicas pulidas a la franquicia le podría sentar fenomenal. Vamos, algo que vaya más allá de la versión para móviles de 2012.
Singularity
Antes de que Raven Software estuviese dedicada en cuerpo y alma a Call of Duty, antes de que se produjese una huelga en el estudio a la que hace caso omiso Activision, hubo un juego que nos dejó un buen sabor de boca. La desarrolladora presentó en 2010 Singularity, una apuesta que nos traslada a un momento de la Guerra Fría en la que Rusia buscaba ganarle terreno a Estados Unidos a toda costa.
Los experimentos llevados a cabo por los soviéticos no terminaron todo lo bien que esperaban y las fluctuaciones temporales comenzaron a suceder en Katorga-12. Ahí es donde entramos nosotros, el capitán Nathaniel Renko. Cambiando continuamente de épocas, el juego nutría su jugabilidad de las posibilidades que otorga manejar el tiempo, con toques de terror y hasta un modo multijugador.
Como muchos otros ejemplos anteriores, el respaldo en ventas no fue el que nadie de los implicados esperaba, pero no nos negaremos a ver un shooter que apueste de forma directa por la narrativa, más allá de pegar algunos tiros con los amigos.
Skylanders
Otra saga muy jugosa y a la que se ha referido directamente Bobby Kotick para su recuperación. Skylanders era un atractivo enorme para los más pequeños de la casa, pudiendo utilizar figuras reales que se trasladaban a los videojuegos. Un acercamiento amable a los videojuegos, con mecánicas sencillas de seguir y con un apartado visual resultón.
La franquicia pasó por muchas manos, con múltiples entregas durante la década de los 2010, aunque se ha mantenido en el olvido a lo largo de los últimos seis años. Extraño pensar a una renuncia así por parte de Activision, máxime teniendo en cuenta las posibilidades económicas a nivel de merchandising, series de televisión y asociaciones con otras franquicias, como ya sucedió con Crash o Spyro.
GUN
Si querías una buena aventura de vaqueros en 2005, estabas prácticamente obligado a escoger entre Red Dead Revolver y GUN. Ambos precursores y juegos que influenciaron de forma obvia a Red Dead Redemption, lo cierto es que aquella duda hoy en día ya no existe. Hemos tenido alternativas a GTA en Sleeping Dogs o Mafia, pero para el lejano Oeste solo podemos optar por Red Dead Redemption 2.
GUN podría ocupar ese espacio libre. No rindió mal el juego, pero desde luego Activision no ha vuelto a echar un vistazo hacia él. La historia de Colton White no tiene que llegar a los niveles gráficos, jugables ni de narrativa de la de Arthur Morgan, sencillamente es ofrecernos un motivo más para liarnos a tiros en la cantina.
Hexen
Un caso peculiar el que tenemos aquí. Raven Software lanzó Hexen en 1995 para PC, Sega Saturn, PlayStation y Nintendo 64, en lo que sería recordado como un Doom con magia e inspirado en D&D. Mientras que Raven desarrollaba, id Software publicaba la obra mientras John Romero y el resto seguían enfrascados en Doom II.
Raven Software fue adquirida por Activision en 1997 y el destino les vuelve a reunir tras la última compra de Microsoft. Phil Spencer se ha postulado a favor de traer de vuelta el uso de hechizos y pócimas con fórmula shooter, así que no vamos a ser nosotros los que le digamos que no.
True Crime
Antes mencionábamos a Sleeping Dogs, el título que en su día estuvo a punto de convertirse en True Crime: Hong Kong. Sin embargo, Activision no estaba nada satisfecha con el trabajo realizado en la tercera entrega por United Front Games. Square Enix pescó en río revuelto, se llevó los derechos de publicación y el resto es historia.
Lo que no se pudo llevar la compañía japonesa fueron los derechos sobre la propia franquicia de True Crime, que siguen en manos de Activision. Streets of L.A. fue un buen primer paso, pero New York City nos metió toda la adrenalina en el cuerpo al poder ser un matón más en el cuerpo de policía o respetar las leyes como el que más. A falta de un GTA VI, bienvenidas otras opciones.
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