No es ninguna novedad decir que los jugadores escritorio son los que más músculo técnico sacan, más opciones jugables reciben gracias a los mods y más se benefician de los precios del mercado digital. ¡Incluso disfrutan de online gratuito! Pero todo tiene un precio: el número de tramposos es realmente preocupante.
Algo que en los juegos single-player sólo consigue comprometer la experiencia de los propios jugadores, pero que supone una amenaza de cara a aquellas propuestas enfocadas al online. Sobre todo cuando cada vez se fomenta más su carácter competitivo, en el cuál el protagonismo de una estupenda clasificación online se acompaña con la obtención de cajas de botín. Unas capaces de ofrecer incluso más ventajas extra a los tramposos.
Y es que da igual que se trate de entornos más abiertos como Steam o más controlados como Battle.net: cada vez es más frecuente encontrar a jugadores con una puntería perfecta, recursos ilimitados o una capacidad de ataque más acentuada. Y detrás de éstos hay una compañía que busca lucrarse ofreciendo este tipo de servicios. De hecho, este puede ser el talón de Aquiles de los tramposos, al menos en China.
En China los videojuegos se toman muy en serio
China siempre ha sido un país de contrastes: puede que no tengan reparos en cuestión de clonar ideas o títulos prácticamente completos, pero existe tolerancia cero a las irregularidades en los juegos. De hecho, entre enero y noviembre de este año se han llevado a cabo 120 operaciones policiales contra desarrolladores y vendedores de hacks y software de terceros que afecte al juego online.
Según informa Tencent, el pasado 13 de diciembre se llevo a cabo una operación con tres nuevos detenidos, acusados de crear y vender herramientas que ofrecían ventajas en 'PlayerUnknown's Battlegraunds'. Curiosamente un juego en el que el la mayoría de las trampas provienen de China, según indicó Brendan Greene, el propio creador del juego, a Kotaku.
Bluehole: "How do we stop people cheating in PUBG?"
— Daniel Ahmad (@ZhugeEX) 22 de diciembre de 2017
Tencent: "We have opened an anti cheat task force and worked with the police to arrest 120 individuals who have been selling cheat software for the game illegally" pic.twitter.com/0f50MseQzH
Tal y como subraya el analista Daniel Ahmad, la propia Tencent, el gigante asiático -que además dispone de los derechos de 'PUBG' en China- se ha asociado con las autoridades competentes de la ciudad de Jiangyin para crear una iniciativa contra estas prácticas.
Desde el pasado 1 de diciembre, la conferencia de "PUBG" que tuvo lugar en el evento de Tencent Games, Tencent lanzó un solemne compromiso con los jugadores: dar a los jugadores la oportunidad de crear un entorno de juego divertido y justo a través de medios legales y técnicos.
Ahora bien, como se puede ver en el comunicado, no existe una ley contra las trampas en los videojuegos. De hecho, es responsabilidad de las compañías el penalizar a aquellos que hacen uso de estas. La clave está en atajar a aquellos que vulneran o corrompen software de terceros de manera ilícita. Algo que en China puede llegar a estar penado con años de prisión.
Puede que el mundo de los juegos online sea virtual, pero también está amparado por la ley. La propiedad digital del usuario está bajo una protección legal real, mientras que aquellos desarrolladores que obtienen ganancias por ofrecer herramientas ilegales serán sancionados por la ley.
Según el derecho penal [de China]: "las consecuencias del delito de destrucción de los sistemas de información informáticos son graves, cinco años de prisión o detención penal, las consecuencias son especialmente graves, más de cinco años de prisión." Por lo tanto, los usuarios involucrados en la producción y difusión de este tipo de hacks y herramientas del juego se enfrentarán al castigo de la ley.
Un precedente a considerar, y no sería el primero
China ha tardado en abrirse a la entrada de los Videojuegos, pero no cabe duda de que está dando pasos de gigante en muy poco tiempo: el año pasado por estas fechas estableció que los juegos que deseen ofrecer cajas de botín tendrán que desglosar los contenidos incluidos, algo que -por cierto- fue adoptado hace cuestión de semanas en la Appstore.
Está claro que el carácter proteccionista de China tiene sus ventajas e inconvenientes. De hecho, es el propio Gobierno quien decide qué se publica, provocando que muchos estudios deleguen la responsabilidad de editar sus juegos a compañías chinas que adapten sus propuestas a la normativa vigente.
Y sí, el colosal número de jugadores de China hace que todos los estudios estén interesados en entrar en ese mercado, sin excepciones. Es más, incluso la propia Nintendo ha publicado varios de sus éxitos como 'Super Mario Galaxy' o 'Zelda: Twilight Princess' en un sistema Android hace muy poco. ¡Poca broma!
Sin embargo, hay que admitir que -a día de hoy- el tema de las trampas y los hacks en experiencias como 'Overwatch' o 'PUBG' es un problema muy serio que no solo compromete la experiencia de los jugadores, sino que entorpece la llegada de contenidos nuevos y los planes de futuro. Algo que ya matizó Blizzard poco antes del lanzamiento de su shooter.
Siempre nos hemos tomado muy en serio las trampas en los juegos de Blizzard, y esa actitud no será diferente en 'Overwatch'. Uno de nuestros valores fundamentales como una empresa es "respeto e integridad", y es algo que hemos tomado en serio no sólo en el diseño del juego, sino también en la manera en la que hemos desarrollado nuestros planes de futuro para el juego y nuestros jugadores tras del lanzamiento.
Blizzard adelantó que los tramposos serían baneados sin contemplaciones de 'Overwatch' y ha perfeccionado el sistema de detección y denuncias por parte de los usuarios. Con todo, esto no evitó que hubiese quien se aprovechara para sacar tajada ofreciendo sus propias herramientas, a cambio de una mensualidad.
Lógicamente, las consolas tampoco se libran de las trampas por parte de los jugadores, y no podemos obviar que aquellos que usan ratón y teclado en los shooters cuentan con un extra de puntería capaz de sentenciar cualquier partida, pero hay que admitir que se trata de un entorno muchísimo más justo.
La autoproclamada Master Race de jugadores de PC se enfrenta a esta amenaza cada vez mayor. ¿Es suficiente con banear a los usuarios de por vida y denunciar a las desarrolladoras de trampas por la vía judicial? Lo que está claro es que mientras haya alguien dispuesto a pagar por esta clase de servicios, el problema no estará resuelto.
Más Información | Tencent
Ver 3 comentarios