Que hay una revisión de Nintendo Switch en el horno es algo que todos tenemos claro. Más allá de los rumores, y salvo alguna excepción puntual, todas las sobremesas y portátiles de la Gran N han recibido un nuevo modelo o un impulso técnico. Y, vamos a ser justos, hay muchos aspectos concretos de Switch que merecen ese empujoncito extra.
Porque décadas antes de que viésemos la llegada de PS4 Pro o Xbox One X, Nintendo lanzó una no tan recordada NES-101. ¿El caso más reciente? New Nintendo 2DS. Y que se haya ampliado la brecha de hardware entre Switch y las alternativas de Microsoft y Sony obliga a la casa de Mario y Link mover ficha. Lo cual deriva en una pregunta que se hace sola: ¿qué esperar de la próxima Switch?
Con la perspectiva de que ya han pasado cuatro años desde su lanzamiento, en VidaExtra hemos decidido tomar la iniciativa a la hora de imaginar el futuro de Switch por partida doble:
- Por un lado, recopilando en un mismo sitio lo que se ha dicho sobre la próxima consola de Nintendo, cogiendo la información con pinzas.
- Pero, además, estableciendo nueve aspectos clave para que incluso los que ya tienen una Switch o una Switch Lite se sientan tentados de hacerse con un nuevo modelo.
Porque tenemos claro que Switch superará las 100 millones de consolas vendidas. Los nuevos juegos de Pokémon, Metroid y The Legend of Zelda serán los que marcarán la diferencia y elevarán esas cifras. Pero, claro, queremos que el sistema de Nintendo siga mirando de tú a tú al resto con conversiones espectaculares. Siguiendo más la estela de DOOM Eternal que el rebatible ejemplo de FIFA o WWE 2K.
A continuación, las nueve cosas que le pido ala revisión de Switch. Todas ellas, por cierto, muy razonables.
Una mejor pantalla: queremos ver Hyrule a más de 720p en portátil
La portabilidad de Nintendo Switch es una de sus mejores características. Poder jugar a The Witcher 3, Overwatch o Dragon Ball FighterZ donde queramos y cuando es un lujo, desde luego. Precisamente por ello, mejorar su pantalla, limitada a una resolución de 1280x720, debe ser el punto de partida de cara a mejorar la experiencia del jugador.
Según Bloomberg, Nintendo apostaría por una pantalla OLED de Samsung de cara a la revisión. De hecho, incluso adelantan que será más grande que la actual, que es de 6,2 pulgadas. Y no solo eso, apuntan a que esa revisión estará en las estanterías más pronto que tarde.
Tanto la tecnología OLED como el mayor tamaño de la pantalla supondrían cambios serían muy acertados, sobre todo a la hora de nivelar lo que debe ofrecer Switch frente a los móviles iOS y Android actuales. Sin embargo, ya metidos en la nueva década, lo propio es jugar en portátil a juegazos e imprescindibles con una resolución Full HD.
Un micrófono o un sistema de comunicación que nos haga olvidarnos de la App
Hablando en plata, el sistema de comunicación de Nintendo Switch tiene demasiado margen de mejora. Los chats de texto en Monster Hunter Rise no son la mejor solución, y Fortnite ha demostrado que existe una alternativa a la app de Nintendo Switch Online.
Una solución práctica, que no ideal, sería incluir en la consola un sistema de micrófono similar al de los DualSense de PS5 o al pad de Wii U. De modo que sea posible ofrecer chat de voz en los cada vez más numerosos y ambiciosos títulos con multijugador online. Especialmente, con vistas a un Splatoon 3 al que le vendría de perlas.
Hay muchas opciones alternativas, claro. Desde unos Joy Con con tecnología de comunicación integrada a un Dock que sea algo más que una base de carga que puedas enchufar al televisor. Puestos a pedir, la integración de Discord sería un acierto total. En cualquier caso, Nintendo necesita mejorar su sistema de comunicación.
Que siga siendo portátil y sobremesa
Un movimiento clave de cara a la actual Nintendo es que por primera vez, al menos desde el lanzamiento de Game Boy, tiene casi todo su ecosistema de juegos unificado en un sistema. Dicho de otro modo: tanto los estudios propios como los socios están desarrollando títulos para una consola que se puede usar en portátil o sobremesa. Aunque, claro, eso no quita que Nintendo le siga haciendo ojitos a los dispositivos móviles.
Con Nintendo Switch Lite abarcando la cuota de sistemas 100% portátiles y de precio más asequible, la nueva revisión -o, al menos, el modelo principal- no solo debería continuar apostando por afianzar la experiencia en sobremesas, sino sacarle todavía más y mejor partido a poder conectar la consolas a los televisores actuales.
En este aspecto, desde la más reciente actualización de firmware de Nintendo Switch se ha comenzado a hablar del un nuevo modelo de dock, cuyo nombre en clave sería Cradle Aula, que asentaría las posibilidades del nuevo modelo de la consola. Quizás a través de nuevas prestaciones o simplemente a través de nuevos puertos de conexión.
En cualquier caso, ofrecer una sobremesa que te puedas llevar dónde quieras debe seguir siendo el aspecto central de Switch.
Más espacio de almacenamiento sí o sí
Da igual si apuestas más por el formato físico o el digital: los 32 GB de memoria que ofrece Nintendo Switch son muy poco. Demasiado. Sobre todo, cuando aproximadamente 6,2 GB de la memoria interna están reservados para el sistema operativo de la consola.
No es que no haya alternativas: siempre es posible ampliar la capacidad con una tarjeta microSD y, a diferencia de las consolas de Microsoft y Sony, no necesitas instalar la mayoría de los juegos: básicamente los contenidos de post-lanzamiento y digitales y poco más. Otros juegos, sin embargo, directamente te advierten que necesitarás una tarjeta para poder jugarlo. Y eso supone un coste adicional.
No es que necesitemos que el nuevo modelo de Switch ofrezca 1 TB de almacenamiento , sobre todo si eso hace que se dispare el precio. Y hay que admitir que el espacio que ocupan juegos esenciales en digital como The Legend of Zelda Breath of the Wild (14,766 GB) o New Super Mario Bros U Deluxe (2,572 GB) es sorprendentemente reducido. Pero lanzar una revisión y conservar los 32 GB seria un error total.
Mejor procesador: es hora de actualizar componentes
El procesador Tegra NVIDIA integrado en Nintendo Switch nos ha dado grandes alegrías. No solo le ha dado un grato impulso a los imprescindibles de Wii U, sino que ha sido suficiente para mover conversiones a medida de títulos absolutamente esenciales de Xbox One y PS4 y juegazos impresionantes como Super Smash Bros. Ultimate o Monster Hunter Rise
Dicho lo cual, nos encontramos con una triple circunstancia:
- Es evidente que muchos de los juegos actuales de Switch ya ponen su hardware contra las cuerdas. Y pese a que el motor Unreal le sienta de maravilla, las concesiones de resolución y rendimiento se irán notando cada vez más.
- Por otro lado, y en base a lo anterior, varias fuentes han afirmado que Nintendo incorporará al nuevo modelo de la consola un nuevo chip de Nvidia, el cual mejorará los gráficos y la capacidad de procesamiento de ésta. Como comentamos, no hay nada oficial al respecto.
- Sin embargo, este dato afianzaría que desde septiembre de 2020 (según Boomberg) la propia Nintendo alentase a los estudios de desarrollo a dar el salto a resoluciones 4K. ¿Nativas o reescaladas? A efectos prácticos, en ambos casos sería una muy buena noticia.
Vale la pena tener en cuenta que Nintendo tiene un as en la manga: el juego en nube ya es una realidad en Switch a nivel mundial a través de juegos como Control o Hitman 3. Y no solo eso: es capaz de ofrece trazado de rayos.
Con todo, hay juegos de mundo abierto que piden jugarse con mejor rendimiento y resolución; y experiencias multijugador que no merece dejar apartadas del juego cruzado con PSN y Xbox.
Hablemos de los exclusivos, a lo New Nintendo 3DS
Cuando se anunció la primera gran revisión de Nintendo 3DS lo que menos importó fue la suma de aquel pequeño mini-stick: la consecuencia fue que los nuevos modelos recibirían juegos que, por razones de hardware, no podrían moverse en los de lanzamiento.
Algunos de estos juegos fueron elaborados por la propia Nintendo, como Xenoblade Chronicles 3D y Fire Emblem Warriors, mientras que otros fueron indies, como The Binding of Isaac: Rebirth o Runbow. Títulos muy interesantes, desde luego, aunque el verdadero golpe de efecto llegó con la exclusividad de la Consola Virtual de SNES.
Damos por hecho que la sucesora de Switch moverá todos y cada uno de los juegos lanzados. Ya bien sea en tarjeta de juego como en digital. Dicho lo cual, ¿volveremos a ver un movimiento como el de New 3DS en una revisión de Nintendo Switch? Si bien no es descartable, Nintendo deberá realizar el movimiento con una sutileza muy especial de cara a un público que es mucho más exigente con la marca.
Porque la secuela de Breath of the Wild sería la excusa perfecta para estrenar Switch o hacerse con otra, pero no sería ni inteligente ni de recibo que los más de 80 millones de usuarios de Switch repartidos a nivel global se quedasen sin la muy esperada continuación de las aventuras de Link.
Con todo, damos por hecho de que habrá elementos que sacarán mejor partido a un modelo más potente o con más almacenamiento. La vía más interesante, en este caso, sería similar a la que hicieron Microsoft y Sony de cara a sus revisiones inter-generacionales: crear parches específicos para los modelos más avanzados y no fragmentar su comunidad de jugadores.
Algo más de autonomía por batería o modo ahorro
Cuando se anunció Nintendo Switch hubo un dato que no pasó desapercibido: la duración de su batería en modo portátil dependería del juego, y -de manera aproximada- podríamos disfrutar de una gran producción fuera del dock de la consola durante unas tres horas.
A diferencia del almacenamiento interno, la autonomía de Switch no ha sido uno de los talones de Aquiles como sistema. No solo por que es sencillísimo seguir jugando desde la tele, sino porque hay soluciones con la forma de baterías externas o la muy sencilla posibilidad de conectarla a una toma de corriente.
En este sentido, y salvo que se tratase de una partida online, en circunstancias normales si se agota la batería reanudaremos nuestra partida justo en el punto dónde lo dejamos. Un acierto se mire como se mire.
Con todo, el extra de poder de un nuevo procesador abre dos interesantes opciones que son muy comunes en los dispositivos móviles: poder acceder a una especie de boost mode para los juegos ya disponibles o prolongar la vida de la batería con un modo de ahorro energético.
Dicho lo cual, que Nintendo amplíe una o dos horas la autonomía de un nuevo modelo de Switch es una petición más que razonable. Sobre todo, con juegos tan irresistiblemente adictivos como Animal Crossing o Stardew Valley.
Hablemos de los Joy Cons
Cuando Nintendo lanzó Wii, su revolucionario sistema de control por movimiento fue un golpe sobre la mesa. Sony y Microsoft se subieron al carro y, de la noche a la mañana, todo el mundo tenía ideas para sacarle partido al Wiimote. Lo cierto es que los Joy Con no han tenido tanta suerte, y la mejor prueba de ello es la existencia de la Nintendo Switch Lite.
Teniendo en cuenta que Nintendo y el resto de compañías van a tener que seguir dando forma a juegos para la Switch 100% portátil, sería interesante hacer un rediseño de los Joy Con que los haga más ergonómicos, que sean más generosos con el tamaño de los botones o, ya puestos, que evoque las características y sensaciones de jugar con el mando pro. Sobre todo, si la clásica cruceta está de vuelta.
Me refiero a un nuevo modelo de Joy Con que, bien planteado, también beneficie a los actuales poseedores de Switch. Porque jugar a cuatro Joy Con a Super Mario 3D World es una maravilla, desde luego. Sobre todo cuando ésta no está reñida con disfrutar de la experiencia en Single Player con una mejor ergonomía.
En cualquier caso, siempre está la opción de adquirir un par de Joy Cons clásicos para disfrutar de experiencias como Nintendo Labo o Ring Fit Adventure. Uno de los grandes aciertos de los Joy Con es su naturaleza intercambiable, y hay ediciones especiales de estos mini-mandos que son todo un capricho.
Nintendo, si vas a lanzar una nueva Switch, que no te pase como a Sony o Microsoft
El mayor problema de PS5 y Xbox Series X es que ambas se han visto superadas por su propio éxito: los problemas de stock y los las dificultades a la hora de obtener componentes para redoblar su producción se traducen -de cara al usuario- en que dar el salto generacional en PlayStation o Xbox no es una una cuestión de juegos o de precio, sino de suerte y de paciencia.
Un aspecto que Nintendo deberá tener muy en cuenta de cara a lanzar un nuevo modelo de Switch. Sobre todo, cuando las versiones mini de las clásicas NES y la SNES ya pasaron por algo similar, generándose de manera colateral todo un entramado de especulación. Es más, cuando la Switch llegó a las estanterías pasó algo similar.
Si bien, Nintendo no anunciado un nuevo modelo de Nintendo Switch hasta ahora, desde septiembre de 2020 varios medios han afirmando que la línea de producción de la nueva consola está operando a un 120%.
¿Suficiente ritmo como para satisfacer la cantidad de pedidos de esa consola que, de manera oficial, todavía no existe? Bueno, depende de lo interesante que sean las novedades con las que sea presentado. Pero si algo tenemos claro, por encima de todo lo anterior, es que la Gran N se ha propuesto superar las 100 millones de Switch vendidas. Y para llegar a esa brutal cifra, primero deberá fabricarlas.
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